Feijóo censura que el PSOE «arrincone» a los discrepantes con su deriva y manda su apoyo a González y Guerra

Dice que el independentismo ya no necesita moverse del sofá para tener sus exigencias

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha reprochado al PSOE que se centre en «arrinconar» o «purgar» a todo miembro «discrepante» en su partido, destacando que las figuras históricas en el socialismo contrarias a la amnistía simplemente se sienten «orgullosos» de la Transición y defienden que hay «valores» que no deben ser destruidos.

Es más, ha reivindicado que estos socialistas, en clara alusión a Felipe González y Alfonso Guerra auque sin citarles, «tienen toda la razón» y «todo su reconocimiento» pese a que, a tenor de los «insultos» que han recibido, tiene la percepción de que son voces históricas que «ya claman en el desierto».

También ha alertado al PSOE de su «profundo error» en su relación con las fuerzas independentistas, dado que pese a tener menos votos se arroga la «mayor influencia histórica» debido a que los «constitucinalistas están más divididos que nunca».

«Es verdad que hay menos protestas, ¿pero para qué se van a movilizar (el independentismo) si obtienen de ustedes todo lo que quieren sin levantarse del sofá?», ha cuestionado Feijóo durante su intervención en el debate en el Congreso para su intento de investidura.

CRITICA LA ACTUAL INCOMUNICACIÓN CON EL PSOE

Desde la tribuna de la cámara, Feijóo ha lamentado la «anomalía» que supone la actual incomunicación entre PP y PSOE, cuando lo lógico es que los partidos que se han alternado para los grandes acuerdos del país se entiendan, cualidad que aprecia como «requisito inexcusable» para ser presidente del Gobierno.

Y es que ha reivindicado que su partido es la primera fuerza política del Congreso, tiene mayoría absoluta en el senado, gobierna en 12 comunidades, preside la Federación Española de Municipios y gestiona más de 3.200 municipios, entre ellos 30 de las 50 capitales de provincia y en 27 diputaciones provinciales.

«¿Puede nadie aspirar a gobernar España dando la espalda al partido que sostiene toda esta presencia territorial?», se ha preguntado Feijóo para censurar las concesiones que está dispuesto a dar los socialistas al independentismo catalán.

Luego, ha ironizado que los independentista no necesitan salir a la calle dado que hasta la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, va a buscarles a casa, en alusión a la reciente reunión que mantuvo en Bruselas con el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont.

SEGUIRÁ CON LA MANO TENDIDA PESE A LOS DESPRECIOS DE SÁNCHEZ

Por tanto y dirigiéndose a la bancada socialista, Feijóo ha reprochado que «resulta lamentable» que el PSOE llegue a un punto donde ha sobrepasado «barreras antes infranqueables», como «acusar de golpismo» a todo el que salga de la línea oficial (en referencia a las críticas al expresidente José María Aznar), o incluso «purgando a «socialistas discrepantes», en una clara alusión a la expulsión de Nicolás Redondo.

Al hilo ha evocado a González y Guerra, para desgranar que «no son nostálgicos de un tiempo perdido para siempre» ni «idealizan el pasado», sino que están orgullosos de la Transición y de «principios y valores» que son «verdaderos» ni pueden «ser destruidos por nadie».

Eso sí, ha precisado que «ningún español moderado y progresista de verdad, vote al partido que vote, estará solo» ni tampoco su «esfuerzo será en vano», convencido de que volverá el momento en que las dos principales fuerzas políticas volverán a entenderse.

Después y apelando directamente a Sánchez, el líder popular ha prometido que sus «desprecios» nunca cambiarán su actitud porque los españoles no quieren pactos de estado y no esperan de los dos principales partidos «enfrentamientos, insultos ni egocentrismos».

En consecuencia, ha indicado que pese que Sánchez abandera un «bloque» en el que no tiene espacio la mitad de los españoles, seguirá tendiendo la mano al PSOE, pese a que España nunca debió llegar al punto de «decadencia moral en la política» que, bajo su criterio, representa el presidente del goibierno en funciones.