La mayoría de los chilenos descarta que el referéndum constitucional pueda desarrollarse con «normalidad»
Un 57 por ciento de los chilenos ve poco probable que el referéndum constitucional impulsado por el Gobierno de Sebastián Piñera pueda desarrollarse con «relativa normalidad», a pesar de que tres de cada cuatro ciudadanos están a favor de reformar la Carta Magna, según un sondeo.
La encuesta, elaborada por la firma Cadem a partir de 708 entrevistas, estima que el 72 por ciento se inclina por votar a favor de la reforma, seis puntos más que la semana pasada. El no , por su parte, ha pasado del 25 al 22 por ciento, si bien siete de cada diez prevén que la polarización entre las dos corrientes aumente en las próximas semanas.
Sobre el método para redactar la nueva Constitución, un 50 por ciento se inclina por una Convención Constituyente, es decir, por que se elija expresamente a todos los responsables de su elaboración. Un 42 por ciento apuesta en cambio por una Convención Mixta, en la que el 50 por ciento de los puestos estarían reservados a miembros del Congreso.
El sondeo mantiene en niveles mínimos la aprobación de Piñera, que ronda el 11 por ciento, mientras que la tasa del conjunto del Gobierno se sitúa apenas tres puntos por encima, en el 14 por ciento. El ministro de Hacienda, Ignacio Briones, es el miembro mejor valorado (43 por ciento), mientras que el de Salud, Jaime Mañalich, se sitúa en el lado contrario de la lista con un respaldo del 13 por ciento.
Sin embargo, el ministro al que los chilenos consideran más influyentes es al responsable de Interior, Gonzalo Blumel, uno de los rostros más visibles dentro del Ejecutivo por la ola de protestas iniciada a mediados de octubre, tras la cual se criticó la actuación de las fuerzas de seguridad.
Un 59 por ciento de las personas entrevistadas por Cadem está a favor de que se mantengan las movilizaciones y, de hecho, nueve de cada diez prevén nuevas marchas masivas en los próximos meses. La población chilena, en cualquier caso, se muestra reacia a optar por la vía violenta, injustificable para el 68 por ciento de los encuestados.
