FAES pide estimular la oferta de vivienda frente a políticas de «mayor intervención pública»
La Fundación FAES ha pedido este lunes que se estimule la oferta de vivienda para reducir los precios y aumentar la accesibilidad de los ciudadanos, frente a medidas de «intervención pública» que «generan inseguridad jurídica y desincentivan la inversión», en alusión al proyecto de Ley por el Derecho a la Vivienda del Gobierno.
El economista Juan Van-Halen, autor del especial Papeles FAES La política de vivienda que España necesita , critica que la ley que prepara el Ejecutivo interviene el mercado de la vivienda «a través del control de los precios del alquiler, la calificación permanente de las viviendas protegidas, las reservas de suelo y la imposición de penalizaciones fiscales sobre las viviendas vacías» y denuncia que aborda el problema de la vivienda desde «una aproximación ideológica».
Van-Halen propone en su informe que «alternativas con soluciones que respetan la libertad individual», como el desarrollo de una estrategia nacional para la construcción de viviendas asequibles y recuerda que las decisiones que se tomen en esta legislatura tendrán su efecto en la próxima.
Sobre este punto, FAES precisa que es necesario diferenciar ente vivienda social, que debe ser provista por el sector público, y la vivienda asequible, promovida por el sector privado. «Por este motivo, la política de vivienda debe ser una política de Estado, con la mayor estabilidad posible», agrega el informe.
LIBERALIZAR SUELO
También propone agilizar los procedimientos de urbanización de suelo, con una simplificación de la normativa y la burocracia, ya que, según señala el autor del estudio, «los largos procesos de transformación del suelo reducen la oferta y encarecen la vivienda».
Van-Halen defiende en su artículo una «tolerancia cero con la ocupación ilegal», por lo que pide «reforzar la seguridad jurídica en el mercado de la vivienda». En su opinión, esta falta de seguridad jurídica hace que en España exista una gran cantidad de viviendas vacías que no están disponibles en el mercado del alquiler. Para solucionarlo, aboga por incentivos en lugar de penalizaciones a los propietarios.
Entre las recomendaciones para estimular oferta de vivienda, el informe apunta a utilizar el suelo vacante de las administraciones públicas para desarrollar un gran parque de alquiler público con colaboración público-privada. De esta forma, se promueve tanto la vivienda en alquiler como en propiedad.
Van-Halen también invita a repensar el modelo de la vivienda protegida tras más de 80 años sin apenas cambios. «Es necesario plantear un debate en profundidad sobre el futuro de la vivienda protegida, sin ayudas públicas desde 2013 y con la amenaza de la calificación permanente», apunta.
La Fundación FAES recuerda en este estudio que el acceso a la vivienda de los jóvenes debe ser una prioridad, por lo que insta a explorar nuevas fórmulas de financiación de la vivienda a través de la colaboración público-privada.
Por último, el economista de FAES recuerda que la llegada de los fondos europeos Next Generation son una oportunidad para solucionar parte del problema de la vivienda, además de generar empleo.