Facua denuncia a la distribuidora Comapa por «vender jamones polacos como si fueran de Trevélez»
GRANADA, 20
La asociación Facua-Consumidores en Acción ha presentado una nueva denuncia contra la distribuidora de ibéricos Comapa ante la Dirección General de Consumo de la Comunidad de Madrid por supuestamente «vender jamones procedentes polacos como si fueran de Trevélez», en la Alpujarra de Granada.
La distribución bajo la marca Trevedul, según ha informado Facua en una nota de prensa, buscaría «relacionar este producto con la localidad» alpujarreña, que «se caracteriza por poseer la indicación geográfica protegida Jamones de Trevélez en aquellos que se elaboran en la región».
Facua también reclama «sanciones proporcionales a la dimensión del fraude y los beneficios ilícitos obtenidos del mismo», para «evitar multas insuficientes que no disuadan a la empresa de seguir cometiendo este tipo de prácticas».
Señala que en el etiquetado de los distintos jamones que se comercializan bajo la marca Trevedul aparece la siguiente información: «Jamón natural: Sierra Nevada», «Jamón blanco curado bodega: Jamón bodega de Granada Trevedul» y «Jamón blanco curado reserva: Jamón curado reserva Trevedul».
La página web que Comapa posee para promocionar la marca Trevedul recoge: «Trevedul. Lo natural de la Alpujarra», «cada jamón Trevedul contiene toda la pureza de Sierra Nevada y toda la riqueza de matices de Granada. No hay nada más auténtico» y «la tradición manda: abrimos y cerramos las ventanas, haciendo que el mítico chorrillo de Sierra Nevada se cuele en nuestro secadero. La receta es sencilla: carne, sal marina, aire puro, luz natural y paciencia. Mucha paciencia», ha agregado Facua.
En el propio jamón, sin embargo, aparece impresa la matrícula del matadero donde se sacrificó el animal del que proviene el producto, que comienza con las siglas PL correspondientes al código internacional que identifica a Polonia, ha informado la asociación.
En este sentido, Facua indica que el etiquetado de estos productos puede «provocar que el consumidor los adquiera bajo la creencia errónea de que el origen del jamón y su curación se encuentran en la localidad de Trevélez, cuando realmente no es así». Además, la carne procedente de esa zona tiene una índicación geográfica protegida que los jamones alpujarreños no poseen.
En cuanto al estado de la cuestión, la asociación se ha hecho eco de informaciones periodísticas que apuntan a que Comapa «ha decidido retirar finalmente esta marca del mercado».
Además, se ha incluido en la denuncia a una segunda marca de Comapa, Altos de la Alpujarra, que indica en su etiquetado que está producido por Jamones de Oro de Granada SLU, con domicilio en la localidad granadina de Atarfe.
Al no pertenecer este municipio a la zona de la Alpujarra granadina, la asociación entiende que «la empresa habría incurrido en una práctica comercial engañosa destinada a que el consumidor crea que está comprado realmente jamón de esta zona, con las características especiales que posee, cuando realmente no es así».
Es la segunda denuncia que Facua interpone contra Comapa, habida cuenta de que, el pasado mes de marzo, ya lo hizo por supuestamente «vender en esa ocasión jamones también procedentes de Polonia bajo la marca Jamones Sierra Alpujarra, identificando incorrectamente este producto como originario de la región granadina». La empresa también ha eliminado esta marca.
Posteriormente, la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha comunicado a Facua en referencia a esta denuncia que «se encontraba ya abierto un procedimiento administrativo contra la comercial Comapa a consecuencia de actuaciones de control ya realizadas» y que «se va a proceder a realizar las actuaciones oportunas al respecto».