Extremadura reafirma su compromiso para trabajar «juntos» en «fortalecer» los derechos de las personas con discapacidad
MÉRIDA, 3
La consejera de Salud y Servicios Sociales de la Junta, Sara García Espada, ha reafirmado el compromiso de la comunidad para trabajar «juntos como sociedad» por un mundo «más inclusivo» y «fortalecer» así la «cultura del respeto y solidaridad» hacia las personas con discapacidad.
Así, ha incidido en la necesidad de seguir trabajando para «garantizar» los derechos de las personas con discapacidad «en todo momento» en un mundo «inclusivo y accesible» como un elemento «más» de la «diversidad humana».
De este modo se ha pronunciado durante su intervención este viernes en Mérida en el acto institucional con motivo del Día Nacional de la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad, celebrado en la Sala de Banderas de la Presidencia de la Junta, y donde ha celebrado la eliminación ya conseguida del término disminuido en el artículo 49 de la Constitución Española.
«Hay que garantizar los derechos» de las personas con discapacidad, ha espetado García Espada, quien también ha avanzado que el Ejecutivo regional trabaja para abrir «a la mayor brevedad» un tercer Cadex en la comunidad, y que se ubicará en Mérida.
En esta línea, también ha reafirmado que para su consejería es una «prioridad» garantizar «la mejor atención» para los niños y adolescentes con discapacidad, a los que hay que «garantizar sus derechos y libertad en igualdad de condiciones», y ha recordado que prueba de ello son los acuerdos firmados con el SES y el Sepad para facilitar el acceso precoz a tratamientos en atención temprana.
De igual modo, ha destacado que en Extremadura hay 1.825 plazas de atención temprana, así como 4.014 tratamientos de rehabilitación funcional para niños mayores de 6 años. «Es una prioridad que los niños con discapacidad accedan lo antes posible a estos servicios», ha espetado.
A su vez, el delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, durante su intervención en el acto ha apostado por «asentar en el devenir diario» las necesidades y derechos de las personas con discapacidad, bajo la consideración de que «la discapacidad es diversidad».
También ha incidido en la importancia de, además de cambiar leyes, continuar trabajando para «cambiar sobre todo la mentalidad de la sociedad» hacia este colectivo.
«Lo primero es escuchar y entender los problemas de las personas con discapacidad», ha subrayado Quintana, para posteriormente con «colaboración» buscar «las mejores soluciones» y así «avanzar como sociedad y en derechos».
En este marco, además de la defensa de los derechos de las personas con discapacidad, ha ahondado en la necesidad de proteger a las personas «vulnerables» en general para construir de ese modo «una sociedad más justa e igualitaria».
De igual manera, ha pedido a las personas que trabajan en esta materia que «alcen la voz» y expliquen al resto de la ciudadanía la laboro que realizan, todo ello bajo la consideración de que «una sociedad igualitaria y justa crea ciudadanos felices».
Al respecto, Quintana ha destacado medidas en favor de la igualdad ya introducidas en España como la Ley de Dependencia, el voto en sistema Braille, o la señalítica para personas con algún déficit cognitivo utilizada en las elecciones de 2019 en la región.
CERMI
De su lado, en el acto celebrado en Mérida, el presidente de Cermi Extremadura, Pedro Calderón Rodríguez, ha pedido que los temas relacionados con la discapacidad queden «fuera de la controversia política», algo que a su juicio se ha conseguido en la región en la aprobación de determinadas leyes en los últimos años y que «dignifica a la vida política».
Así, ha señalado la necesidad de aplicar el «diálogo» para aportar «soluciones favorables» a las necesidades y derechos de las personas con discapacidad; así como ha abogado por que desde las administraciones se dote de los recursos suficientes a las familias con miembros con discapacidad, para promover así la «igualdad» y la «dignidad».
De forma específica, Calderón también se ha referido a la importancia de garantizar la «inclusión» y «defensa integral» de los derechos de los niños y adolescentes con discapacidad «como unos iguales más», en unos entornos que sean «respetuosos» e «inclusivos», y a los que se les asegure su derecho a expresar su opinión en todo lo que les concierna con una participación «efectiva» en la vida pública.
En esta línea, ha defendido que hay que garantizar el derecho a la salud y a las prestaciones socio-sanitarias de «calidad» y de manera «inmediata» y «sin barreras» para promover así la «máxima autonomía personal» de las personas con discapacidad.
El presidente de Cermi Extremadura, igualmente, ha recalcado el «compromiso» del movimiento Cermi con la educación «inclusiva» y de «calidad» con «total determinación».
Además, en declaraciones a los medios previas al acto, Calderón ha tachado de «inadmisible» el retraso en la valoración de la discapacidad que se registra en Extremadura, y que es «de los mayores de toda España», y ha alertado de que «eso cercena derechos y perjudica gravemente la inclusión y la vida de las personas y las familias».
«Es algo que la Administración autonómica tiene que conseguir arreglar, tiene que conseguir que sea rápida la atención y la valoración de las personas con discapacidad», ha apuntado Calderón, quien ha señalado que el tiempo medio para el reconocimiento de la discapacidad en Extremadura se sitúa en «casi tres años», frente a los «ocho-nueve meses» de media nacional. «Es algo sangrante que nos dicen que está en vías de solución y confiamos en que así sea… Los números que se alcanzan en Extremadura son duros y difíciles», ha añadido.
MANIFIESTO
A su vez, en el acto también dos niños han leído un manifiesto elaborado con motivo del Día Nacional de la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad, que en este año se conmemora con el lema «La agenda política de la infancia y la discapacidad hasta el año 2030».
Con ello, Javier Sánchez de Miguel, en representación de la Asociación Calma-Feafes Extremadura, y Jesús Arrabal, de ONCE Extremadura, han dado lectura a un texto en el que, entre otras cuestiones, se defiende la educación inclusiva como «la base de una comunidad abierta», así como se incide en la necesidad de preservar «siempre» la integridad frente a cualquier forma de maltrato o abuso hacia las personas con discapacidad.
También el manifiesto aboga por la dotación de entornos recreativos y deportivos «sin barreras ni exclusiones»; por que los niños y adolescentes con discapacidad «han de ser escuchados» en todos los espacios «relevantes» para su desarrollo personal.
«Ha llegado el momento de sentar las bases para el desarrollo sostenido y robusto del mandato del nuevo artículo 49 de la Constitución Española sobre atención específica a las necesidades de los menores de edad con discapacidad», ha señalado Javier Sánchez de Miguel, quien ha añadido que esta reforma constitucional «ha abierto un nuevo universo para la protección de los derechos de la infancia con discapacidad y favorece que el conjunto de los poderes públicos en el marco de sus respectivas competencias se tengan que sentir incluidos».
«El cambio sólo será posible en la medida en que todas las instancias implicadas asuman su papel y celebren la diversidad enriquecedora de la que son portadores las niñas y niños con discapacidad», ha apuntado a su vez Jesús Arrabal.