Expertos y pacientes reclaman una actualización del plan nacional de terapias avanzadas para garantizar su efectividad
Expertos y pacientes han coincidido en reclamar una actualización del Plan de Terapias Avanzadas del Sistema Nacional de Salud para garantizar su efectividad y accesibilidad a terapias innovadoras por parte de pacientes con enfermedades como el linfoma folicular o la leucemia en adultos.
Esta ha sido una de las principales conclusiones a la que han llegado los expertos que han participado en el encuentro Workshop sobre Terapias Avanzadas: 5 años del Plan Nacional de Terapias Avanzadas, presente y futuro en España , celebrado este martes en Madrid y organizado por Gilead Sciences.
El Plan de Abordaje de Terapias Avanzadas del Sistema Nacional de Salud se aprobó en España en 2018. Desde entonces, estas terapias han seguido evolucionando, destacando las terapias CAR-T, una alternativa a tratamientos como la quimioterapia para enfermedades como el linfoma de células grandes.
El CAR-T (Chimeric Antigen Recetor T-Cell) es un tipo de terapia celular y génica en la que el paciente hace las veces de donante, mediante la extracción y modificación de sus linfocitos T –y su posterior infusión– para que tengan la capacidad de atacar a las células tumorales.
En palabras de la hematóloga del Hospital Universitario La Paz de Madrid, Irene Sánchez Vadillo, «las terapias CAR-T han venido a abrir una nueva puerta a curar enfermedades con mal pronóstico con un perfil de toxicidad manejable».
Por su parte, el jefe del servicio de Hematología en el Hospital Universitario 12 de Octubre, Joaquín Martínez, ha señalado como principales desafíos el retraso en el acceso de estas innovaciones terapéuticas en España, la falta de financiación o el exceso de trámites burocráticos.
Martínez ha explicado que ese retraso en el acceso por parte de los pacientes a este tipo de tratamientos, así como la falta de financiación supone para el paciente «perder una oportunidad para poder seguir viviendo» y provoca una situación «muy frustrante» también para los médicos que tratan a ese tipo de pacientes.
NECESIDAD DE ACTUALIZACIÓN DEL PLAN DE TERAPIAS AVANZADAS
En la misma línea se ha pronunciado el director de la Unidad de Terapias Avanzadas de Kite Pharma (Gilead España), Marc Obrador, al hablar de «necesidades médicas no cubiertas» y sin alternativas terapéuticas de los pacientes con enfermedades oncohematológicas que no tienen acceso a terapias avanzadas como las terapias CAR-T.
«España, que hace cinco años se situó como pionera en la implementación de las terapias celulares, hoy en día está a la cola de Europa», ha lamentado. Obrador ha explicado que, a pesar de ser un país «claramente investigador», la innovación no está llegando a los pacientes.
Para la presidenta de la Asociación Española de Linfoma, Leucemia y Mieloma (AEAL), Begoña Barragán, «es una incongruencia pertenecer a un país pionero en investigación, pero que a la hora de llevar la innovación investigada a los pacientes tarta danto y lo hace con tantas limitaciones».
«Las personas que tienen que acceder a las terapias son personas que han sufrido varias recaídas y tienen un mal pronóstico. No se pueden permitir esperar más», ha explicado.
Durante su intervención, Barragán también ha reflexionado sobre el valor de las personas y el coste económico de los tratamientos. «Estos tratamientos tienen un coste elevado pero el paciente que se trata con ellos se cura o se puede curar», ha señalado. «No solamente hay que mirar el coste del tratamiento, sino lo que deja de costar en otros tratamientos el paciente» ha concluido.
Este «reto» de adecuarse a las necesidades de los pacientes es, tanto para la doctora Sánchez Vadillo como para el doctor Martínez, solventable con la colaboración conjunta entre todos los agentes implicados, ya sean de carácter público o privado.
APUESTA POR LA INNOVACIÓN E INVESTIGACIÓN HEMATO-ONCOLÓGICA
En este sentido, Obrador (Kite/Gilead España) ha explicado que actualmente las terapias «disruptivas» como las CAR-T están avanzando para mejorar la eficacia, acortar tiempos de fabricación, y disminuir los efectos secundarios.
Así, para acortar tiempos de fabricación de las terapias CAR-T, Obrador ha explicado que Kite ha implementado en su planta de Ámsterdam los mecanismos necesarios para su desarrollo. También ha puesto en valor la presencia de una fábrica de estas características en Europa a la hora de reducir los tiempos hasta que el tratamiento llega al paciente que, de media, tarda 80 días.