Expertos ven en la ley de reducción de la inflación americana una «oportunidad» para alianzas con la UE
La directora y senior fellow del Center for Strategic and International Studies (CSIS) de Washington, Emily Benson, ha considerado que la nueva legislación americana frente al cambio climático «es una oportunidad» para forjar alianzas entre Estados Unidos y la Unión Europea.
En una jornada organizada por Fundación Naturgy y el Real Instituto Elcano (RIE) sobre Sendas geopolíticas de la transición energética: la relación transatlántica , expertos internacionales han analizado cómo se está articulando la respuesta europea tras la publicación de la ley de reducción de la inflación (IRA, por sus siglas en inglés) por parte de Estados Unidos.
Así, la analista del CSIS explicó que la IRA se aprobó para fomentar inversiones, reducir emisiones y reforzar la investigación y desarrollo de tecnologías verdes, siendo «la mayor inversión climática de la historia, ya que inyectará más de 800.000 millones de dólares en la economía americana en los próximos 10 años para tecnologías verdes, en una combinación de ayudas, créditos fiscales y avales».
Benson recalcó que todavía es «muy difícil» ver quiénes serán los grandes beneficiarios de la IRA, pero sí que subrayó que «ha tenido ya un impacto significativo en el comercio».
Así, a pesar de los diferentes modelos para hacer frente al reto climático que representan Estados Unidos y Europa, estimó que ambos mantienen puntos en común, coincidiendo en «la importancia de bajar el riesgo frente a China, antes que reducir el acoplamiento económico».
REYNÉS: «MANTENER UNA CIERTA PERSPECTIVA DE INCENTIVO A LA INVERSIÓN».
Por su parte, el presidente de Naturgy, Francisco Reynés, contrapuso también en su intervención los dos modelos a los que se enfrenta actualmente el mundo de la energía, como son el americano, «que con la IRA incentiva con políticas fiscales y no fiscales, la inversión y la transición energética, y el europeo, que mantiene una aproximación donde prima el cortoplacismo de la sobrerregulación».
A este respecto, el directivo afirmó que desde la compañía se defiende «siempre la iniciativa privada de tomar ventaja de todas oportunidades, para incentivar el trilema energético de la sostenibilidad, la seguridad de suministro y los precios razonables».
Por ello, advirtió de que el reto que existe actualmente pasa por «buscar un equilibrio entre estos tres objetivos, pero también el cuarto reto que envuelve todo esto es que ello se haga manteniendo una cierta perspectiva de incentivo a la inversión, y una cierta recuperación de la misma, y que la sociedad obtenga un beneficio a corto, medio y largo plazo».
Por su parte, el director del Real Instituto Elcano, Charles Powell, resaltó otro triple reto al que se enfrenta la Unión Europea, como son la relación con Estados Unidos en un momento de guerra en Europa, la política frente a China en un momento de auge de este país, y la relación con el conjunto de economías emergentes que no están aplicando sanciones contra Rusia.
«La relación transatlántica es preocupante para nosotros porque es una relación de desequilibrio», según Powell, que afirmó que «la brecha económica, militar y tecnológica entre Estados Unidos y Europa está aumentando y esto se traduce en una creciente irrelevancia de Europa a ojos de Estados Unidos».