Expertos piden un cambio en el modelo de visado de fármacos porque «dificulta el acceso» a los pacientes crónicos
Algunos medicamentos requieren de autorización previa a su dispensación mediante el visado que debe ser autorizado de manera presencial, una herramienta que, en el caso de algunos fármacos y en los últimos años, se ha convertido en una «barrera» que «dificulta el acceso» a los pacientes crónicos, ha señalado el diputado en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados y ex consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, quien apuesta por un cambio de modelo.
Echaniz, quien ha participado junto con otros ponente sexpertos en el Encuentro Informativo bajo el título El futuro del visado , organizado por Europa Press y Novo Nordisk, ha afirmado que este será uno de los objetivo cuando el Partido Popular vuelva al Gobierno Central.
El visado de inspección es una herramienta que sirve para garantizar la correcta prescripción, aproximadamente el 3 por ciento de la prescripción electrónica requiere visado, «y por tanto se establece en su momento para garantizar aquellos medicamentos que necesitan un especial control del médico, y por la seguridad del paciente, y además porque tienen un significativo coste para el sistema sanitario y así se controla una prescripción inadecuada», ha explicado.
A su juicio, a lo largo de los últimos años este sistema se ha convertido en «obstáculo» en el acceso a determinados medicamentos que termina generando un problema burocrático, además de un problema para la gestión del tiempo de los médicos y, en consecuencia, un aumento del gasto. Además, ha añadido, «se ha convertido en un perjuicio en los enfermos crónicos y, por tanto, ha llegado el momento buscar una alternativa que mejore, desde el punto de vista de la calidad de prestación este sistema que ha quedado anticuado».
Para Echaniz la responsabilidad es del Ministerio de Sanidad, competente en el desarrollo del visado, y de la Agencia Española del Medicamento. «El ministerio que tiene la patata caliente», ha advertido, lamentando que en estos momentos el Gobierno tenga otras prioridades.
Precisamente la directora General de Inspección Sanitaria de la Comunidad de Madrid, Elena Mantilla, adelantaba en este encuentro que a finales de septiembre o principios de octubre se va a implantar el visado de recetas por autocontrol de los medicamentos que lo requieran, siempre tras la primera autorización de recetas de forma manual.
La medida, que será pionera en el territorio nacional y beneficiará a 1,8 millones de pacientes crónicos de la Comunidad de Madrid, ha demostrado mejorar la adherencia del pacientes al tratamiento; reducir sus visitas a los centros de salud; y, lo que todos han destacado como importante a la hora de hablar del control del gasto del Sistema Nacional de Salud (SNS), ha demostrado no incrementar el gasto farmacéutico.
Con el objetivo de evitar que durante la pandemia los pacientes crónicos pusieran en riesgo su salud por tener que acudir a renovar el visado de algunos de sus tratamientos, la Comunidad de Madrid suspendió de manera temporal la presencialidad para renovar estos visados. Ahora, «se va a flexibilizar al máximo», ha señalado, aclarando que «no se trata de su eliminación», ya que es una medida establecida por el Ministerio de Sanidad, y «hay algunos medicamentos que van a seguir con el visado tradicional».
Así, en el caso de la Comunidad de Madrid en algunos fármacos se mantendrá el visado reglamentario, el 80 por ciento pasará al autocontrol y en un tercer grupo de medicamentos se eliminará el visado definitivamente, «porque es obsoleto». «Si ocurriera un incremento del gasto brutal», como la Comunidad de Madrid sabe lo que se ha estado pautando en años anteriores, «se tomaran medidas» mediante una auditoría sanitaria y «en el caso de que haya un pico descontrolado en el consumo de un determinado medicamento».
«El Gobierno de España debería estar tomando nota, las asociaciones de pacientes, que son seis millones de personas sometidas a tratamientos crónicos, están aplaudiendo y empujando para que esta medida, que se ha demostrado que funciona, y va a seguir funcionando, se establezca en todo el territorio nacional», ha explicado Mantilla, quien ha señalado que ya hay CCAA interesadas.
El portavoz de Ciudadanos en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, Guillermo Díaz, apuesta por realizar estudios a nivel nacional para conocer de manera más detallada los problemas de esta herramienta.
«La eficacia del visado se ha medido y ese estudio dice que el acceso a los medicamentos sometidos a visado tienen tres problemas principales, por los que muchas veces no se accedía a un medicamento cuya prescripción necesitaba; y, por este orden, eran, la causa administrativa, la segunda causa era la económica, y la tercera causa era la clínica», ha señalado.
Para Díaz no hay necesidad de llegar al Gobierno Central para implantar la medida, considera, por ejemplo, que se puede llegar a un acuerdo de mayorías mediante una iniciativa parlamentaria. No obstante, se reafirma en que es necesario un estudio a nivel nacional donde se amplíe el foco para medir mejor los costes de asistencia social, y si la medida es beneficiosa para la población «no hay que esperar dos años para cambiar la situación».
Finalmente, el economista de la Salud y profesor Asociado de la Universidad Carlos III, Jorge Mestre, ha valorado positivamente el cambio en el caso de los pacientes con diabetes que tienen algunos tratamientos sujetos al visado. «El visado se ha convertido en una herramienta obsoleta en el contexto del paciente crónico que necesita muchas más acciones», ha afirmado el experto, quien considera que «además puede tener unos costes importantes que hay que evaluar».