Expertos del CIBERNED destacan el diagnóstico precoz como clave para lograr una solución a la enfermedad de Alzheimer
El diagnóstico precoz como clave principal para lograr una solución a la enfermedad de Alzheimer, anticipándose a la aparición de los primeros síntomas de esta patología neurodegenerativa, han señalado expertos reunidos en el XIV Foro CIBERNED, la reunión organizada por el Centro de Investigación Biomédica en Red sobre Enfermedades Neurodegenerativas (CIBERNED) y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).
En este sentido, doctora Eva Carro, investigadora principal de CIBERNED y jefa del Grupo de Investigación en Enfermedades Neurodegenerativas del Instituto de Investigación del Hospital Universitario 12 de octubre, ha expuesto las conclusiones de uno de sus últimos estudios, cuyos resultados respaldan la utilidad de la lactoferrina salival como biomarcador de la enfermedad de Alzheimer.
Según este hallazgo, Carro ha explicado durante una de las sesiones científicas del foro que un descenso en los niveles de lactoferrina salival está vinculado al desarrollo de la patología.Y aunque la búsqueda de biomarcadores es fundamental, tampoco se pierde de vista el hallazgo de nuevos tratamientos.
Por otro lado, el doctor Jesús Ávila, director científico de CIBERNED, ha presentado las principales conclusiones de su estudio sobre los beneficios de la reprogramación neuronal in vivo , cuyos resultados apuntan, en modelos animales, a un aumento de la neurogénesis adulta (proceso mediante el cual se generan nuevas neuronas) y a una mejora de la memoria.
Los últimos avances en la investigación de la enfermedad de Parkinson apuntan a que hay dos tipos de neuronas implicadas en los movimientos anormales e involuntarios de la musculatura orofacial (discinesia) provocados por esta enfermedad.
En el encuentro, inaugurado por la directora del ISCIII, Raquel Yotti, la doctora Rocío Moratalla, IP de CIBERNED y del Instituto Cajal del CSIC, ha presentado las conclusiones de su estudio sobre la plasticidad estriatal implicada en esta enfermedad motora, cuyos resultados en modelos animales reflejan que la L-DOPA produce cambios plásticos en los dos tipos de neuronas implicadas. Como ha explicado la investigadora, la estimulación exclusiva de las neuronas D1 dispara los movimientos involuntarios de la musculatura orofacial, mientras que la activación de las D2 pone en marcha otros programas motores.
Por su parte, el investigador Jordi Alberch, IP de CIBERBED y de la Universidad de Barcelona, ha incidido en nuevas hipótesis sobre la degeneración en la enfermedad de Huntington, a partir de resultados que permitirían identificar nuevas dianas terapéuticas para el tratamiento de la patología.