Expertos critican que «el exceso de trámites» provoca un retraso «insalvable» en las intervenciones de Atención Temprana
Expertos en Atención Temprana han criticado que «el exceso de trámites» provoca un retraso «insalvable» en los niños que necesitan intervenciones de Atención Temprana, ya que, en este tipo de acciones, «cada minuto cuenta».
Así lo han puesto de manifiesto en un seminario sobre la situación actual de esta estimulación precoz en niños organizado por la Fundación Gmp y Plena Inclusión Madrid. «Estamos preocupados porque, hace años, esos niños llegaban con meses, pero ahora llegan con 3 e incluso 5 años», ha puesto de manifiesto el director general de Plena Inclusión Madrid, Javier Luengo, que ha recordado que la edad límite para recibir estas intervenciones se sitúa en los 6 años.
«El proceso administrativo retrasa todo el aprendizaje, que es vital que se produzca cuanto antes. Cada minuto de atención temprana que no se da en las primeras etapas de la vida se ha perdido», ha añadido Luengo. «Esos seis años de vida solo pasan una vez, y toda la plasticidad que se puede hacer para ganar desarrollo, ya nunca se va a recuperar, y es un lujo que no nos podemos permitir, por el presente y por el futuro de los niños», ha expresado.
Por todo ello, la delegada de Derechos Humanos y Coordinadora de Incidencia en Confederación ASPACE, Ángeles Blanco, ha afirmado que el futuro de la atención temprana pasa por «evitar el peregrinaje de las familias y, sobre todo, definir la composición de los equipos multidisciplinares que van a atender a cada niño, dada la diversidad de cada caso».
Por su parte, Rubén Rodríguez, director del Instituto Chárbel de Neurorrehabilitación, ha hecho hincapié en la necesidad de extender el límite de edad de estos pacientes. «Cuando llegan a los 6 años, los pacientes tienen que dejarlo y tienen que empezar a ir de forma privada», apostilla. Por ello, Rodríguez ha instado a las Administraciones a invertir más recursos en Atención Temprana.
«El cerebro no madura hasta los 21 años. ¿Por qué hay que parar los 6 años? No hay ningún motivo clínico que nos diga que a los 6 años hay que parar de atender», ha insistido el experto. A su juicio, también sería necesaria una mayor especialización dentro de las intervenciones, en función de la afectación de cada paciente y su discapacidad.
Por todo ello, también ha insistido en que la Atención Temprana «tiene que ser universal». «Es necesario sustentar un modelo único, que todo el mundo tenga la misma posibilidad de tratamiento y que haya centros especializados en cada provincia», ha concluido.