Expertos advierten de que el virus respiratorio sincitial es el principal motivo de hospitalización en menores de 2 años
Expertos en pediatría han incidido en la importancia de prevenir los contagios por virus respiratorio sincitial (VRS), la primera causa de infección respiratoria aguda en niños y el principal motivo de hospitalización en menores de 2 años en países desarrollados.
Actualmente, se estima que las infecciones por este virus originan entre 7.000 y 14.000 hospitalizaciones cada año en España. La causa más frecuente de hospitalización pediátrica en menores de un año en España son las bronquiolitis.
«De media, hasta el 2 por ciento de los niños menores de dos años que presenta una bronquiolitis precisan de hospitalización, el grueso de estos ingresos se produce en los meses de invierno. Aunque la tasa pueda parecer baja, el impacto hospitalario es grande ya que la mayor parte de las hospitalizaciones coinciden entre los meses de diciembre y enero», ha comentado el presidente de la Sociedad Española de Neonatología (SENEO) y jefe del Servicio de Neonatología del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid, Manuel Sánchez Luna, con motivo del Día Internacional del Niño Hospitalizado.
En este sentido, el doctor afirma que las medidas de prevención juegan un papel fundamental a la hora de poner freno al virus y evitar que las temidas hospitalizaciones se produzcan. «La pandemia ha demostrado que las medidas de prevención son realmente efectivas, no sólo frente a la COVID-19, también frente a otros virus como el VRS: distanciamiento social, mascarillas, higiene. Estas medidas son las más importantes», ha apuntado.
El experto señala además que hay otros factores como la lactancia materna que también ayudan a poner freno a los contagios: «Mediante la leche materna se transmiten anticuerpos naturales cuando la madre ha estado en contacto con el virus, no sólo protege frente al VRS sino frente a otros virus.»
El virus puede ser especialmente perjudicial en el colectivo de riesgo, como son los bebés prematuros, los niños con enfermedad respiratoria crónica por prematuridad, con cardiopatías congénitas hemodinámicamente significativas en los primeros dos años de vida.
Por su parte, Lorena Navarro, enfermera en consultas externas de pediatría del Hospital La Ribera de Valencia y miembro del Comité Nacional de Universo VRS (iniciativa de AstraZeneca para contribuir a mejorar la prevención del virus respiratorio sincitial), coincide con Sánchez Luna en la importancia de prevenir las infecciones por VRS, y recuerda el grave impacto que puede tener para los familiares la hospitalización en los casos más graves.
«Hospitalizar a un niño que tiene meses, con una bronquiolitis es una situación imprevista que resulta difícil para la familia. Existe una afectación importante de niños que sufren el ingreso y lo que es peor, la UCI», ha destacado.
Se estima que entre el 2 y el 6 por ciento de los menores de un año hospitalizados por VRS requieren de cuidados intensivos. «Existen casos de niños que tienen que ser intubados, y esto requiere una mayor separación de los padres. Las estancias van de los siete días en el mejor de los casos a los 10 o 15 en las situaciones más complicadas», ha afirmado.
Además, los expertos coinciden en que las hospitalizaciones pediátricas pueden llegar a suponer un trauma para la familia y los menores, y abogan por mejorar la estancia hospitalaria para reducir el estrés de los implicados. «Las principales necesidades de los niños ingresados son los cuidados de enfermería, la atención sanitaria, el entretenimiento, para hacer una estancia lo más agradable posible. Por este motivo tratamos de favorecer mucho la escucha y el respeto», ha explicado Navarro.
En la misma línea, Sánchez Luna defiende la humanización de los hospitales para mejorar la experiencia de los menores y sus familiares y apuesta por fomentar la formación de las especialidades pediátricas. «Necesitamos que los hospitales se conviertan en lugares agradables para los niños y sus familias, son niños y ocupan poco espacio, pero no por ello cualquier lugar es válido para los pequeños. Las áreas especialmente diseñadas para ellos son de vital importancia para evitar que sean atendidos en zonas de hospitalizaciones de adultos», ha aclarado.
Además, ha señalado que los niños deben ser atendidos siempre por pediatras con una formación adecuada. «Cualquier especialización debe ampliar su ámbito pediátrico para saber cómo tratar perfectamente a un niño. Es necesario visibilizar el reconocimiento de las áreas pediátricas», ha remachado.