Experto aboga por el manejo del sarcoma en centros especializados y con un enfoque multidisciplinar
El doctor Eduardo Ortiz, jefe de Equipo de la Unidad de Sarcomas del Hospital Ruber Internacional, ha abogado por un manejo del sarcoma debe realizarse en centros expertos en sarcomas multidisciplinarios.
En ese sentido, subraya la importancia de que los procesos diagnósticos y terapéuticos en pacientes con sospecha o diagnóstico de sarcoma sean discutidos en un «comité multidisciplinario de sarcomas, en el que participen, como mínimo, anatomopatólogos, radiólogos, cirujanos, oncólogos médicos y oncólogos radioterápicos, aunque en total se pueden contar aproximadamente 23 especialidades trabajando en los pacientes con esta neoplasia». Tal y como ha destacado, la derivación precoz a un centro especializado mejora la supervivencia de los pacientes.
La doctora María Ángeles Vaz, especialista en Oncología Médica y Adjunta de la Unidad de Sarcomas del hospital madrileño, asegura que esta neoplasia rara tiene unas características especiales que la diferencian de otros tumores, en primer lugar, porque «no surge de un órgano concreto, como ocurre en el cáncer de mama o en el de colon».
Además, apunta al papel «clave» del personal de enfermería y administrativo tanto para la coordinación de citas como para seguir a los pacientes, «asegurando una atención integral y continua».
Por ello, considera decisivo el diagnóstico temprano del tumor, ya que, cuanto más pequeño sea el bulto, más fácil es la intervención. Cuando las lesiones son mayores o implican estructuras vasculares o nerviosas relevantes, se requiere la colaboración de otros especialistas quirúrgicos, como cirujanos vasculares.
El doctor Pablo Gallo, jefe de la Unidad de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Ruber Internacional, detalla que «el sarcoma a veces está en intimo contacto a los vasos sanguíneos, por lo que entonces debemos resecar el tumor sin lesionarlos o, en ocasiones, sustituir el paquete vascular por un by-pass de vena, arteria o de los dos, que hace la función del vaso que se ha extirpado».
Según el especialista, antes de realizar el tratamiento, «es clave hacer un buen estudio del paciente para ver esa proximidad a los vasos y tener una idea general de cuál va a ser el tratamiento». En ese sentido, añade, tanto la resonancia como el escáner y la ecografía son claves para hacer un planteamiento prequirúrgico.
La reconstrucción de estructuras anatómicas, evitando la amputación de extremidades, es posible gracias al papel de la cirugía plástica, y es que estos profesionales reconstruyen esos tejidos en quirófano, ya sean tendones, músculos o incluso hueso, mediante tejido microvascularizado, minimizando las secuelas y posibilitando una recuperación precoz. Además, de su correcta reconstrucción depende que los pacientes puedan someterse a radioterapia en un tiempo adecuado. El doctor César Casado, responsable de la Unidad de Cirugía Plástica, afirma que «a la hora de resecar un tumor de este tipo no basta con eliminar el tejido afectado, dado que el comportamiento agresivo del sarcoma exige extirpar tejido sano de alrededor, que nos sirve de barreras anatómicas».
Para la doctora María Purificación Domínguez, jefa de Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Ruber Internacional, la complicidad entre patólogos y cirujanos es esencial para conocer la localización exacta del tumor y poder valorar los márgenes quirúrgicos en la biopsia intraoperatoria y así ayudar al cirujano a conseguir esos bordes libres de tumor.
«Además, los patólogos interpretamos los hallazgos histológicos en función de los datos clínicos, por ello es fundamental conocer los antecedentes y si ha habido tratamientos de quimioterapia o radioterapia previamente», sostiene.
Precisamente, la radioterapia es otro de los procedimientos fundamentales en el tratamiento de la mayoría de los sarcomas, siendo de especial importancia la experiencia del oncólogo radioterápico. Destaca la doctora Belén Belinchón, especialista en cuanto a radioterapia para sarcomas e integrante de la Unidad de Oncología Radioterápica del Hospital Ruber Internacional. El centro hospitalario madrileño dispone de las técnicas más avanzadas para el tratamiento radioterápico de los sarcomas.
«Según su localización, la radioterapia con técnicas de intensidad modulada, imagen guiada y control del movimiento se administra antes o después de la cirugía o, en ciertos casos, de forma exclusiva. En aquellos pacientes en los que la enfermedad recidiva y es necesario valorar una reirradiación, o cuando existe un número limitado de metástasis, la radiocirugía robótica con CyberKnife permite en pocos días tratar estas lesiones de forma segura, exacta y precisa», asegura la doctora Belinchón.
Desde el punto de vista de los métodos actuales de diagnóstico por imagen, el doctor Fernando Herraiz, especialista en Radiodiagnóstico del Hospital Ruber Internacional, asegura que las técnicas disponibles como la radiografía simple, gammagrafía, ecografía, tomografía computada, resonancia magnética o la tomografía por emisión de positrones aportan datos fundamentales para elección de tratamiento y posterior seguimiento de los pacientes.
«Como expertos, tratamos de identificar y calificar la lesión para una posible evaluación adicional y/o, en algunos casos, realizar muestras de tejido guiadas por imágenes y realizar correlación clínico-radiológica de la patología», subraya.
En definitiva, aparte del aspecto más científico y técnico, la doctora María Ángeles Vaz hace hincapié en el lado más humano de la medicina, ya que «un trato cercano, el tiempo para comprender cuál es su enfermedad y los tratamientos recomendados, el acceso al equipo terapéutico en caso de surgir dudas o complicaciones, la facilidad para conseguir citas médicas o pruebas a realizar por parte del equipo administrativo, instalaciones adecuadas del hospital de día donde se administran los tratamientos de quimioterapia, un equipo de enfermería profesional y cercano; impactarán en cómo el paciente pueda afrontar esta enfermedad».