Etiopía asegura que las tropas de Eritrea desplegadas en la ofensiva contra el TPLF han iniciado el repliegue
El Gobierno de Etiopía ha asegurado que las tropas de Eritrea desplegadas en el país para apoyar su ofensiva contra el Frente Popular para la Liberación de Tigray (TPLF) han iniciado el proceso de repliegue, en medio de los llamamientos internacionales a tal fin y para que se ponga fin a las hostilidades en la región de Tigray (norte).
Billene Seyoum, portavoz de la oficina del primer ministro, Abiy Ahmed, ha destacado en una rueda de prensa que «según las informaciones del Ministerio de Defensa, la retirada ha comenzado», tras una petición formulada por Adís Abeba.
«La petición para una retirada ya ha sido puesta en marcha por parte de las autoridades relevantes», ha manifestado Billene. «Debemos dejar que ese proceso seguir adelante según los acuerdos», ha añadido, tras resaltar que las operaciones contra el TPLF continúan «en dos áreas» de Tigray.
Así, ha manifestado que «se espera que esta fase sea finalizada pronto» y ha agregado que «hay ataques ocasionales en zonas fuera de las mismas para dar la impresión de control y de que toda la región es inestable».
Billene ha denunciado además «ataques contra convoyes humanitarios» por parte del TPLF y ha acusado al grupo de llevar a cabo una «campaña de desinformación» y asesinar a miembros de la administración interina establecida en Tigray por el Gobierno central.
Asimismo, ha recalcado que «las afirmaciones internacionales de que el hambre está siendo usada como arma de guerra son infundadas y motivadas políticamente» y ha hecho hincapié en que la seguridad y la entrega de ayuda a los desplazados por el conflicto son una «prioridad» para las autoridades etíopes.
Por su parte, el fiscal general de Etiopía, Gedion Temotiwos, ha resaltado que las autoridades han presentado cargos contra 28 militares por su supuesto papel en asesinatos y de otros 25 por presuntas agresiones sexuales contra civiles en el marco de la ofensiva contra el TPLF.
Además, ha apuntado que las investigaciones llevadas a cabo sobre la masacre de civiles en Maikadra han permitido identificar a 200 personas que supuestamente habrían participado en la misma, antes de agregar que 23 han sido detenidas y que la mayoría de los sospechosos han logrado escapar a Sudán.
La ofensiva en Tigray ha provocado una grave crisis humanitaria, con el desplazamiento de decenas de miles de personas y la destrucción de parte de la infraestructura, lo que ha hecho saltar las alarmas entre la comunidad internacional.