El Supremo de Colombia abre una investigación contra Uribe por su posible relación en las escuchas ilegales
El Tribunal Supremo de Colombia ha anunciado este martes que abrirá una investigación preliminar contra el expresidente y ahora senador Álvaro Uribe (2002-2010) en relación a las escuchas y perfiles ilegales que el Ejército habría realizado a más de 130 personas, entre ellas periodistas, sindicalistas y políticos.
El Alto Tribunal tomó la decisión el pasado 15 de mayo, según apuntan varios medios colombianos, después de que se presentara una denuncia anónima en diciembre del año pasado en la que se apuntaba la supuesta implicación de Uribe en las escuchas ilegales que la revista Semana destapó hace unos meses.
«Otra indagación preliminar por un anónimo cobarde que dice que soy el beneficiario del informe de las carpetas», ha criticado Uribe en su cuenta de Twitter.
Las autoridades judiciales dispondrán a partir de ahora de 18 meses para recopilar y definir las pruebas que abrirían un proceso formal contra el líder conservador de Centro Democrático.
No es la primera vez que Uribe se ve inmerso en un escándalo de esta índole, pues hace casi una década se descubrió que el ya extinto Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) era utilizado durante su Gobierno para espiar a sus rivales políticos. La que fuera jefa de esta oficina, María del Pilar Hurtado, fue condenada a 14 años de cárcel.
Por su parte, la Fiscalía General citó hace unas semanas para un juicio disciplinario a trece militares por su presunta participación. Se trata de dos generales en retiro, cinco coroneles, tres mayores, un teniente y dos suboficiales adscritos a diferentes dependencias de Inteligencia militar.
A principios de mayo, el ministro de Defensa de Colombia, Carlos Holmes Trujillo, anunció que once oficiales del Ejército colombiano habían sido apartados y que un general de brigada había pedido su retiro voluntario tras la publicación de estas informaciones.
Una de las consecuencias de este escándalo fue la retirada de la candidatura del antiguo jefe de las Fuerzas Armadas Nicasio Martínez a delegado del Gobierno colombiano en la OTAN y la destitución del agregado militar de la Embajada de Colombia en Washington, el coronel Juan Esteban Zapata Cifuentes, uno de los trece militares que tendrá que comparecer ante la Fiscalía.
La investigación de Semana conocida como Carpetas Secretas ha destapado que durante febrero y diciembre de 2019, el Ejército de Colombia habría contado con la colaboración de una agencia de Inteligencia de Estados Unidos, cuyos recursos, destinados para la lucha contra el narcotráfico, fueron desviados para espiar incluso a periodistas estadounidenses, como Nick Casey del The New York Times , quien en mayo de 2019 reveló los formatos que existían en el Ejército para aumentar el número de bajas, algo que se consideró como el regreso de los falsos positivos .