Entra en vigor la reforma que limita las competencias de los agentes del FBI y la DEA en México
La reforma de la Ley de Seguridad Nacional aprobada en diciembre por el Senado de México ha entrado este viernes en vigor y limitará las competencias de los agentes extranjeros, de agencias estadounidenses como la Administración de Control de Drogas (DEA) o la Policía Federal (FBI), en el territorio mexicano.
Así, estos agentes únicamente podrán desarrollar «actividades de enlace» para intercambiar información con las autoridades mexicanas. De esta forma, tanto el FBI y la DEA, tendrán que «rendir cuentas» a las autoridades mexicanas.
Fuentes el Ministerio de Exteriores de México han confirmado al diario Milenio que la medida ha sido trasladada a todas las «representaciones diplomáticas» acreditas en el país.
En este sentido, las embajadas deberán informar al Gobierno mexicano de todos aquellos hechos que, durante las investigaciones realizadas por sus agentes, puedan tener un impacto significativo en la vida del país o que representen una amenaza a la Seguridad Nacional del mismo.
La reforma, presentada ante el Congreso por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, deriva de la detención en octubre pasado del exministro de Defensa, el general Salvador Cienfuegos, que fue acusado de narcotráfico tras una investigación de la DEA. Dicha investigación habría incluido, no obstante, una serie de escuchas ilegales.
Antes de la reforma a la Ley de Seguridad Nacional, las competencias de los agentes extranjeros databan del sexenio del expresidente Carlos Salinas de Gortari.
Sin embargo, a partir de ahora el Grupo de Alto Nivel de Seguridad Nacional quedará supeditado al Ministerio del Exteriores y estará integrado por representantes del Ministerio de Seguridad, las Fuerzas Armadas, el Centro Nacional de Inteligencia y la Guardia Nacional.
El texto decreta, además, que las agencias extranjeras deberán operar en México bajo un tiempo definido y previa autorización, del mismo modo que están obligadas a hacer partícipes a las autoridades mexicanas de la información que recaben en el ejercicio de sus funciones.
A su vez, la reforma da cabida a la posibilidad de que los agentes extranjeros puedan ser sancionados penalmente bajo el marco jurídico mexicano, ya que no tendrán «ninguna inmunidad en caso de incurrir en la comisión de delitos o infracciones», así como por infringir las disposiciones normativas que les prohíben el ejercicio de funciones reservadas a las autoridades de México.
DETENCIÓN DE CIENFUEGOS
El pasado 15 de octubre, el general Cienfuegos, quien se desempeñó como ministro de Defensa durante el sexenio de Enrique Peña Nieto (2012-2018), fue detenido en Los Ángeles, California, acusado de narcotráfico y lavado de dinero.
Bajo la Operación Padrino del Departamento para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos, los agentes estadounidenses dijeron haber hallado indicios y testimonios de la relación de Cienfuegos con el que fuera director de la Secretaría de Seguridad Pública, Genaro García Luna, imputado actualmente por sus supuestos vínculos con el crimen organizado.
Cienfuegos se convirtió así en el primer exministro de Defensa detenido por su supuesta relación con grupos delictivos vinculados al narcotráfico, ya sea en territorio estadounidense o en suelo mexicano.
Sin embargo, el general pudo volver a mediados de noviembre a México después de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos, en donde permaneció detenido un mes, decidiera no presentar cargos de narcotráfico y lavado de dinero contra él.
Este mismo viernes ha sido la propia Fiscalía mexicana la que ha decidido no llevar a cabo acciones legales en su contra por considerar que no tuvo relación alguna con los delitos de narcotráfico y crimen organizado por los que fue detenido en Estados Unidos.