El Tribunal Supremo de Venezuela advierte de una «amenaza inminente» por parte de Guyana y la CIJ
La Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia ha advertido este domingo sobre la existencia de una «amenaza inminente» por parte de Guyana y la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para pretender «impedir» el referéndum sobre el Esequibo, centro de un conflicto territorial entre ambos países.
Cinco magistrados de la sala del tribunal han señalado que el objetivo es «impedir u obstaculizar el referendo consultivo soberana y legítimamente convocado en la República Bolivariana de Venezuela por iniciativa de la Asamblea General», informa la cadena venezolana Globovision.
Los jueces se apoyan en un análisis «pormenorizado» de cómo las distintas constituciones del país han dejado claro que el territorio Esequibo forma parte de Venezuela. «(Atiende) a una verdadera reacción institucional, como resultado de conflictos históricos en la Nación, frente a la pretensión de centros de poder fácticos y foráneos que responden a corrientes ideológicas que propenden a lograr la reproducción de las relaciones de poder y subordinación», ha indicado la sala.
Esta sentencia es la respuesta a un amparo interpuesto por la Asamblea Nacional para que se garantice el derecho a la participación política de los venezolanos en la consulta, organizada para el 3 de diciembre. El recurso pedía responder «categóricamente las groseras e irrespetuosas pretensiones de las autoridades de Guyana de derogar el legítimo Referendo Consultivo para la Defensa de la Guayana Esequiba, a través de solicitudes expresas ante la Corte Internacional de Justicia».
En concreto, Guyana argumenta que Caracas accedió a renunciar al Esequibo después del fallo en 1899, pero que Venezuela posteriormente se retractó de la decisión. Por su parte, Caracas se apoya en el acuerdo firmado en 1966 en Ginebra entre Venezuela y Reino Unido, antigua potencia colonial de Guyana, el cual reconoce que el Esequibo es un territorio en disputa.
Guyana pidió a finales de octubre «protección urgente» de la CIJ «en respuesta al siniestro plan de Venezuela para apoderarse del territorio guyanés». Sin embargo, el Gobierno venezolano ha criticado «las artimañas» del gobierno de Guyana y su estrategia para «desestabilizar la región» y «apropiarse» este territorio.