El Tesoro Público coloca 3.490,5 millones en deuda a largo plazo y cobra más a los inversores
El Tesoro Público ha colocado este martes 3.490,53 millones de euros en deuda a largo plazo, en el rango medio previsto, y lo ha hecho ahondando en los tipos negativos en los bonos a 3 y 5 años, duplicando el interés en el segundo caso, y cobrando también más a los inversores en las obligaciones.
La demanda de la emisión ha superado los 6.000 millones de euros y ha repetido el éxito de las últimas subastas en un momento en el que la prima de riesgo se sitúa en el entorno de los 70 puntos básicos, el nivel más bajo en un año, y la rentabilidad del bono español toca mínimos históricos, por debajo del 0,5%.
En concreto, el Tesoro ha captado 1.178 millones de euros, frente a una demanda de 2.210 millones de euros, con un tipo de interés general del -0,4%, más negativo que el -0,357% de referencia de la subasta del 6 de junio.
Asimismo, ha captado 825 millones de euros con el bono a 5 años, frente a una demanda de 1.172 millones. En este caso, ha duplicado en dos semanas el interés que cobra por este tipo de deuda, ya que el interés marginal ha sido del -0,172%, frente al -0,090% registrado el 6 de junio.
Por último, ha emitido 1.487,5 millones de euros en obligaciones a 15 años, con una demanda de 2.117,5 millones de euros. Con este tipo de papel también ha cobrado más a los inversores, puesto que el interés marginal ha sido del 0,890%, frente al tipo del 1,475% de la puja de referencia celebrada el pasado 23 de mayo.
La subasta de este jueves se une a la realizada el martes, cuando el Tesoro colocó 1.390 millones de euros en letras a tres y nueve meses, por debajo del rango medio previsto de 1.500 millones, y ofreció tipos menos negativos a tres meses pero cobró más a los inversores en la referencia a 9 meses.
Con las dos emisiones de esta semana, el organismo dependiente del Ministerio de Economía completa el calendario del mes de junio y no volverá a los mercados hasta el próximo 4 de julio, cuando realizará otra subasta de bonos y obligaciones.
El Gobierno ha reducido la emisión neta de deuda pública prevista para 2019 a 30.000 millones de euros, frente a los 35.000 millones inicialmente estimados, gracias a la buena evolución de los ingresos fiscales, la ejecución presupuestaria y el ahorro obtenido en la gestión del Tesoro.
Asimismo, disminuye también en la misma cantidad la emisión bruta prevista para este año, situándose en 204.526 millones de euros, un 4% inferior a la del pasado ejercicio.