El teletrabajo pierde fuelle , pero sigue por encima del nivel prepandemia, según CCOO
El 10% de los asalariados, el equivalente a 1,7 millones de personas, teletrabajan en el tercer trimestre del año, porcentaje que se ha reducido siete puntos respecto al pico máximo alcanzado en el segundo trimestre de 2020, cuando el 17% de los asalariados trabajaban en remoto, según un estudio de CCOO difundido este martes.
Pese a que el teletrabajo ha ido perdiendo fuelle según se normalizaba la situación origida por el Covid, el porcentaje de asalariados que trabajaba a distancia en el tercer trimestre superaba en seis puntos el existente antes de la llegada de la pandemia (4%).
«Esto refleja que el teletrabajo ha adquirido relevancia en nuestro país y que se está asentando en muchas empresas y organizaciones, seguramente de forma complementaria al trabajo presencial», subraya CCOO, que ha utilizado para su estudio datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre.
De acuerdo con este informe, dos tercios de las personas que teletrabajan lo hacen habitualmente, frente a un tercio que lo hace de forma ocasional.
Las mujeres suponen el 52% de los teletrabajadores, pese a que suponen el 48% de la población asalariada, y seis de cada diez personas que teletrabajan tienen entre 35 y 54 años de edad.
En cuanto a los sectores productivos, de cada 100 personas asalariadas que trabajan en casa, 18 lo hacen en información y comunicaciones; 17 en educación; 11 en actividades profesionales, científicas y técnicas; 10 en la administración pública; 10 en la industria manufacturera y el resto en otros sectores.
Por lo que se refiere a la distribución territorial, el 54% de la población asalariada que trabaja desde su domicilio reside en la Comunidad de Madrid o en Cataluña, según el informe.
No obstante, CCOO apunta que, a pesar del importante aumento del teletrabajo como consecuencia de la pandemia, España sigue manteniendo una brecha relevante con la Unión Europea, ya que el trabajo a distancia supone el 18% en la UE y el 20% en la eurozona. Esto se debe a que España partía de inicio con niveles muy reducidos de teletrabajo.
Para CCOO, es importante regular y desarrollar el teletrabajo con garantías a fin de que «no suponga una nueva forma de precariedad y explotación» por la falta de control.
El sindicato reclama el cumplimiento de aspectos como el control de jornada, la desconexión digital, los equipos de trabajo o los costes de mantenimiento, tal y como recoge la Ley del Trabajo a Distancia que pactaron los agentes sociales con el Gobierno.