El senador de Vox por Extremadura descarta renunciar a su escaño pese a la insistencia de Guardiola y el PP
El senador de Vox por Extremadura, Ángel Pelayo Gordillo, ha descartado este miércoles renunciar a su escaño en la Cámara Alta pese a las palabras de la presidenta de la Junta, la popular María Guardiola, en las que consideraba que debería dejar su acta como parlamentario por designación autonómica «por coherencia» tras la ruptura del pacto de gobierno regional con el PP.
En declaraciones a Europa Press desde el pasillo del Senado, Ángel Pelayo Gordillo ha confirmado su intención de mantener el escaño por designación autonómica, que fue concedido a Vox en las negociaciones para proclamar a María Guardiola como presidenta de Extremadura.
Ángel Pelayo Gordillo se ha remitido a las declaraciones que ya realizó hace unos días el portavoz de Vox en la Asamblea de Extremadura, Óscar Fernández Calle, que aseguró que su partido no cederá ese puesto porque «lo hecho, hecho está y, además, está bien hecho», y que siguiendo ese criterio el PP debería entregar la Presidencia.
El PP de Extremadura también ha insistido en los últimos días en pedir a Vox que renuncie a su puesto como senador por designación autonómica tras la ruptura del gobierno regional la semana pasada, tal y como anunció el líder de Vox, Santiago Abascal.
Sin embargo, el consejero de Gestión Forestal y Mundo Rural de la Junta de Extremadura, Ignacio Higuero, designado por Vox, anunció que se daría de baja en su partido, después de que la presidenta de la comunidad, la popular María Guardiola, le asegurara que lo mantendría en su puesto en el Ejecutivo autonómico.