El sector químico prevé elevar un 4,8% su cifra de negocio este año y superar ya los 90.000 millones en 2025
Pide al Gobierno un Fondo de Descarbonización que apoye la inversión de 75.000 millones necesaria para la reconversión del sector
El sector químico español prevé cerrar este ejercicio con un crecimiento de la producción del 7,1% y del 4,8% en la cifra de negocios, hasta los 86.453 millones de euros, apoyado en la recuperación de la demanda, tras el ajuste experimentado en 2023, y en el mercado exterior.
Asimismo, aspira a superar los 90.000 millones de euros en 2025, según los datos adelantados en la Asamblea General de la patronal Feique.
En concreto, el sector aspira a mantener esa tendencia alcista el próximo año, con una producción creciendo hasta el 3,2% y una cifra de negocios incrementándose un 4,2%, recuperando la caída de ventas sufrida en 2023 por el ajuste de precios. De esta manera, el sector químico acumularía un crecimiento del 35,7% desde 2019.
Esta reactivación de la demanda se ve también acompañada de un fuerte repunte del volumen de exportaciones, así como en la bajada de la inflación y los tipos de interés que impulsó al sector.
En lo que respecta a la creación de empleo, se prevé un crecimiento del 4%, hasta los 242.000 empleos directos al cierre de este año, y un 3% para el próximo, hasta alcanzar la cifra histórica de las 250.000 personas asalariadas directas, destacando por un empleo de alta calidad: cualificado, estable y de alta remuneración (con una media superior a 42.000 euro/año en 2023), que previsiblemente superará los 45.000 euros en 2024.
No obstante, el comportamiento de los distintos subsectores fue desigual, siendo la química de consumo, especialidades y salud las principales responsables de este crecimiento, mientras que la química básica continuó sin mostrar signos de recuperación productiva debido a los altos costes energéticos y de derechos de emisión.
Así, Teresa Rasero -presidenta de Air Liquide España y Air Liquide Portugal-, reelegida en esa Asamblea presidenta de la patronal para un nuevo mandato hasta 2026, señaló que estas cifras «buenas y bonitas» se producen a pesar de que ha habido plantas del sector «que han visto reducir su producción por problemas de competitividad y de lo difícil del contexto geopolítico».
«Tenemos compañeros que han tenido que sufrir mucho en 2024 y buscamos que el crecimiento pueda ser más estructural», dijo en una clausura de la Asamblea que contó con el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu y en la que también ha intervenido el presidente de CEOE, Antonio Garamendi.
INVERSIONES DE 3.000 MILLONES ANUALES PARA DESCARBONIZARSE.
Por otra parte, la presidenta de Feique defendió que el sector requerirá movilizar unas inversiones de 75.000 millones de euros para alcanzar la meta de descarbonizarse en el horizonte de 2050, a un ritmo de unos 3.000 millones de euros, aunque subrayó que para ello será necesario que la Ley de Industria se complete con un Fondo de Descarbonización que respalde esa inversión en tecnologías limpias y contratos por diferencia para mantener la competitividad.
De esta cifra de 3.000 millones de euros, unos 1.700 millones euros se refieren estrictamente al capex , otros 850 millones euros corresponderían al coste de parada de las operaciones para abordar las modificaciones tecnológicas y 450 millones euros que incluirían los costes de mantenimiento, así como otros necesarios para adaptarse a las modificaciones regulatorias que afecten a las instalaciones.
Por ello, aprovechó la presencia del ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, para reclamar una ayudas a la descarbonización que permitan al sector seguir siendo competitivo. «Que eso que la industria aporta, reciba una parte para ello», dijo, añadiendo que «descarbonizar la industria lo hacemos todos juntos, así que por favor, todos juntos en la descarbonización».
Además, el sector químico valoró que España tiene margen de actuación para lograr un precio eléctrico más competitivo, que debe situarse en el entorno de los 40 euros por megavatio hora (MWh), incrementando las compensaciones de las emisiones indirectas de CO2 y limitando el coste de los servicios de ajuste.
GARAMENDI: IMPUESTOS COMO EL EXTRAORDINARIO «NO AYUDAN A LA INDUSTRIA».
Por su parte, el presidente de CEOE, Antonio Garamendi, insistió en que los impuestos «injustos» como el extraordinario a las energéticas «no ayuda en absoluto» a la industria.
«Nadie está diciendo que no se paguen impuestos, la industria paga muchos impuestos, pero no que sean temporales y luego no», dijo, recordando que hubo empresas que lo tuvieron que abonar incluso teniendo pérdidas.
Además, recordó el efecto de esta medida en apuestas país como el hidrógeno verde «con miles de millones de inversión que están en el limbo, ya que se está estudiando si van a ir ahí o a otro lado».
Asimismo, llamó a una «apuesta decidida» por la industria y a que se la facilite una energía «barata» para ayudar en su competitividad y puso en valor como los informe Draghi y Letta señalan que la empresa es «la clave del futuro de la empresa».