El Rey reivindica el legado histórico de España e invita a los nuevos diplomáticos a conocerlo y difundirlo
Felipe VI entrega sus despachos a la 74 promoción, la primera con más mujeres que hombres
El Rey Felipe VI ha reivindicado el «excepcional legado» que ha dejado España a lo largo de su historia y ha animado a los nuevos diplomáticos a conocerlo y difundirlo y a trabajar para que el país siga contribuyendo «al progreso moral y material de la Humanidad» como ha venido haciendo a lo largo de su historia.
Don Felipe ha presidido en la Escuela Diplomática la entrega de despachos a la 74 promoción de la Carrera Diplomática, la primera en la que ha habido más mujeres (31) que hombres (14), «un hito que refleja una realidad social en la que cada vez más mujeres felizmente desarrollan la acción del Estado en los distintos cuerpos de la Administración General del Estado y acceden a puestos de responsabilidad».
«A lo largo de la historia, España ha dejado por todo el mundo una impronta material e inmaterial indeleble, cuyo valor y trascendencia debemos conocer a fondo y saber transmitir con rigor, equilibrio y sensatez», ha defendido en su intervención el monarca.
En este sentido, ha invitado a los nuevos diplomáticos, «como herederos de ese excepcional legado», a contribuir a que «los españoles sigamos realizando aportaciones sustantivas al progreso moral y material de la Humanidad».
En opinión de Felipe VI, siempre podrán encontrar «inspiración en nuestros grandes pensadores, artistas y científicos, y en tantos insignes servidores del Estado, así como en la voluntad, dedicación, sacrificio y ejemplo de las generaciones que nos han precedido».
«Podéis consideraros muy afortunados de poder trabajar por un país como el nuestro», les ha dicho a los nuevos secretarios de embajada, animándoles a «hacerlo con un patriotismo entendido como espíritu de servicio, con humildad y confianza».
Asimismo, el Rey ha elogiado el esfuerzo y el trabajo que ha llevado a la nueva promoción a conseguir su objetivo. «Abrazáis una profesión muy vocacional cuya principal razón de ser es servir a España, al interés nacional, al Estado, y a través de él a todos los españoles», ha incidido.
«NO BAJÉIS LA GUARDIA»
La variedad de puestos y misiones que ejercerán a partir de ahora, no solo diplomáticas, ha subrayado el Rey, les exigirán «dedicación, rectitud y entrega, cualidades que deben distinguir a todo servidor público».
«Estad atentos a los detalles» porque «el diablo está en los detalles», les ha dicho, y «no bajéis la guardia ni en lo más sencillo», les ha advertido, conminándoles también a no dejar de aprender y a seguir actualizándose, «ni de enseñar dando ejemplo». «Siempre hay sitio para más en vuestro bagaje», ha añadido.
«En un escenario de tantos desafíos concurrentes y de repercusión global como el actual», ha incidido Don Felipe, «serán importantes unas grandes dosis de capacidad analítica y resolutiva, de serenidad y paciencia, de firmeza y perseverancia» por parte de los nuevos diplomáticos. En resumen, «una combinación virtuosa de inteligencia y carácter», ha acotado.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha dado también la enhorabuena a los nuevos diplomáticos, recordando que él mismo estuvo un día en su situación y ahora es ministro. «Habéis elegido una profesión apasionante, no ha habido un solo día en mi vida que me haya arrepentido haberla escogido», ha asegurado.
Albares también ha puesto en valor el hecho de que se trata de la primera promoción en la que hay más mujeres que hombres y ha incidido en que los 35 representan «toda la diversidad de la geografía española, lo que es la sociedad española, diversa, plural, compuesta por mujeres y hombres de gran valía y talento».
Por otra parte, ha resaltado que el «azar de la historia» ha querido que entren en la Carrera Diplomática en «un año crucial para España», que asumirá en el segundo semestre la Presidencia de turno de la UE. En este sentido, ha indicado que precisamente catorce de ellos se incorporarán inmediatamente a la Representación Permanente ante la UE en Bruselas para ayudar en los preparativos.
Asimismo, les ha dado una primera instrucción: «en estos momentos toda vuestra labor tiene que ir dirigida a una única cosa, conseguir que la paz regrese a Europa». También les ha dicho que durante toda su trayectoria deben defender con fuerza un orden internacional basado en reglas.
En su trayectoria, les ha indicado Albares a los nuevos diplomáticos, tendrán que «afrontar retos muy complejos pero serán fascinantes porque al final del día estaréis ayudando a los españoles» y haciendo ver que España es «un socio fiable, leal y democrático».