El rey Felipe VI pone en valor la preparación de las FFAA en la clausura del XXIII Curso de Estado Mayor
El rey Felipe VI ha asistido este miércoles la clausura del XXIII Curso de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, donde ha destacado que están «preparadas para cualquier escenario requerido, aplicando sus capacidades y su ánimo de ser excelentes».
Durante el acto, que ha tenido lugar en la sede del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (CESEDEN) y al que también ha asistido la ministra de Defensa, Margarita Robles, Felipe se ha referido al «contexto actual en el que vivimos y a los muchos condicionantes nuevos», pero ha remarcado que «lo esencial no cambia, esa formación de base, de valores, de conocimientos, de estar a la última».
El rey ha sido recibido por Robles, que ha estado acompañada del jefe de Estado Mayor de la Defensa, almirante general Teodoro López Calderón, y por el director del CESEDEN, teniente general Francisco de Paula Bisbal. También han acudido la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce; la secretaria de Estado directora del CNI, Esperanza Casteleiro; los jefes de Estado Mayor del Ejército deTierra, general de Ejército Amador Enseñat; y de la Armada, almirante general Antonio Martorell, así como la directora de la Guardia Civil, María Gámez.
Tras la bienvenida y momentos antes del inicio del acto, el Rey ha mantenido una audiencia con el número uno del curso, el comandante del Ejército de Tierra Juan Luis Sánchez Álvarez.
Posteriormente, en el Aula Magna del CESEDEN, el evento ha comenzado con unas palabras de su director y del director de la Escuela Superior de las Fuerzas Armadas (ESFAS), teniente general Miguel Ballenilla. Después, se ha hecho la entrega de diplomas a 125 alumnos, de ellos 25 extranjeros de una veintena de países.
A continuación, Felipe VI ha impuesto la condecoración como número uno al comandante Sánchez y ha entregado el nombramiento de alumno de países amigos y aliados más distinguido al comandante Paul Wilks, del Ejército británico.
En el transcurso de la clausura, Robles ha felicitado a Felipe VI con motivo del VIII aniversario de su proclamación como monarca. «Quiero transmitirle el respeto, consideración y el aprecio que sabe que el Ministerio de Defensa y las Fuerzas Armadas tenemos por usted y por lo que la Corona representa: la estabilidad de Estado, el presente inmejorable y un futuro cada día mejor», ha subrayado, según un comunicado del Ministerio de Defensa.
En su felicitación a los recién diplomados, la ministra ha querido resaltar los valores de liderazgo y lealtad que se les han transmitido durante el curso, el de mayor nivel y exigencia de las Fuerzas Armadas.
El acto ha finalizado con un brindis en el que el rey ha felicitado a los nuevos diplomados de Estado Mayor y a sus familiares, deseándoles mucho éxito en sus desempeños profesionales de apoyo y asesoramiento al mando.
ALTA DIRECCIÓN
Un total de cien oficiales españoles, entre ellos ocho mujeres, han finalizado el XXIII Curso de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas. De ellos, 40 pertenecen al Ejército de Tierra; 19 a la Armada, 27 al Ejército del Aire y 2 a Cuerpos Comunes. Además, diez oficiales de la Guardia Civil y dos de la Policía Nacional han obtenido su diploma.
Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Brasil son los países que han enviado entre tres y dos oficiales para realizar el curso de Estado Mayor, mientras que 16 países de cuatro continentes han mandado un representante.
El general Ballenilla ha señalado en su alocución que la evolución positiva de la pandemia de COVID-19 ha permitido desarrollar el curso de un año de duración casi con normalidad.
«Si algo identifica a este curso han sido los trascendentales acontecimientos en el ámbito de la seguridad, como la retirada de Afganistán, la invasión de Ucrania y la Cumbre de la OTAN», ha indicado, señalando que la disuasión ocupará un papel central en el trabajo de los nuevos diplomados.
Los oficiales de Estado Mayor ocupan diferentes puestos en los Estados Mayores nacionales e internacionales, en el órgano central del Ministerio de Defensa y en otras administraciones del Estado donde se considere necesaria su presencia, además de fomentar la cooperación internacional mediante la formación de oficiales de países aliados y amigos, pertenecientes o no a la OTAN.