El presidente de Chile lanza un plan de búsqueda de víctimas de desaparición forzada de la dictadura
El presidente de Chile, Gabriel Boric, ha presentado este miércoles el Plan Nacional de Búsqueda de Verdad y Justicia para las víctimas de desaparición forzada de la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990), coincidiendo con los días previos a la conmemoración del 50 aniversario del golpe de Estado.
Los objetivos del plan son esclarecer las circunstancias de la desaparición de las víctimas y su paradero, garantizar el acceso a la información y participación de los familiares y la sociedad, e implementar medidas de reparación y garantías de no repetición de la comisión del crimen.
Boric ha realizado el lanzamiento oficial del programa durante la efeméride del Día de los Detenidos Desaparecidos en un acto desde La Moneda, al que no han acudido los líderes de los partidos de la oposición.
«Es tiempo de subsanar las ausencias y me permito también lamentar esas ausencias que nos duelen tanto, pero también las ausencias en esta ceremonia, porque acá fueron invitados los presidentes de todos los partidos políticos», ha criticado Boric. Posteriormente, el presidente de Unión Democrática Independiente, Javier Macaya, ha negado haber sido invitado al evento.
El mandatario ha asegurado que se trata de «un tema de democracia» y de Estado: «Asume la memoria de una manera en que no nos moviliza el rencor, sino que nos moviliza la convicción de que la única posibilidad de construir un futuro más libre y respetuoso es conocer toda la verdad», ha agregado.
No obstante, ha reconocido que el «Estado ha fallado en dar respuesta a las familias y a la sociedad entera, en entregar las respuestas que el país necesita». «Los desaparecidos nos faltan a todos», ha zanjado.
Por su parte, el ministro de Justicia, Luis Cordero, ha destacado las aportaciones de la sociedad civil, en especial el de las organizaciones de familiares de víctimas, como elemento necesario para lograr la medida.
En este sentido, Cordero ha indicado que durante mucho tiempo los familiares fueron quienes se encargaron de las búsquedas, pero «el Estado es el que cometió esos crímenes, es el Estado el que tiene que hacerse cargo».
