Investigadores españoles observan que la inhibición de miR-148a disminuye la progresión de la arteriosclerosis
La inhibición de miR-148a reduce la progresión de la arteriosclerosis en un modelo de ratón humanizado , según un estudio liderado desde el CIBERDEM por la investigadora del Grupo de Fisiopatología de les Enfermedades Relacionadas con Lípidos del Instituto de Investigación del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau – IIB Sant Pau, Noemi Rotllan, y que ha sido publicado en la revista Biomedicine & Pharmacotherapy .
Iniciado en la Universidad de Yale y finalizado en el IIB-Sant Pau, este trabajo ha permitido constatar que la terapia con anti-miR-148a reduce tanto el tamaño de la placa arteriosclerótica como la inflamación vascular en un modelo de ratón humanizado como es el ratón APOBTG Apobec-/- Ldlr+/.-.
«El efecto antiaterogénico observado es mediado por los efectos anti-inflamatorios observados en macrófagos tratados con dicha terapia e independiente de cambios en la concentración del colesterol de LDL y HDL», ha detallado la doctora Rotllan.
Los miRNAs son moléculas capaces de regular la expresión de múltiples genes implicados en patologías multifactoriales como la arteriosclerosis y el uso de terapias dirigidas hacia dichos miRNAs está muy extendida.Ya se conocía la importancia del miR-148 en la regulación del metabolismo lipídico en macrófagos, en la homeostasis del colesterol y en la inflamación, pero hasta el momento no se había realizado ningún estudio sobre la contribución de miR-148a en la progresión de la aterosclerosis.
Concretamente, la inhibición prolongada con el LNA 148a dio lugar a placas más pequeñas y con menor contenido de macrófagos pero sin cambios en el contenido de las células vasculares lisas, y también una disminución del contenido de lípidos neutros en el arco aórtico. Además, dichas placas eran más estables ya que tenían una capa fibrosa más gruesa y núcleos necróticos más pequeños.
En el trabajo también se demuestra que la inhibición de miR-148a en macrófagos murinos primarios aumenta la expresión de genes anti-inflamatorios como Arg1, Retlna y Mrc1, y disminuye la expresión de marcadores proinflamatorios como Nos2, Il6, Cox2 y Tnfa.
Así pues, la inhibición de miR-148a disminuye la respuesta inflamatoria de los macrófagos, polarizándose éstos hacia un fenotipo conocido como M2 o antiaterogénico. Además, observaron una disminución del eflujo de colesterol utilizando como aceptor ApoA1 en macrófagos peritoneales tratados con miR-148a.
Sin embargo, no se observaron cambios significativos en la concentración de colesterol de LDL o HDL, tal y como se habían descrito anteriormente, aunque seguramente sea debido al uso de un modelo de ratón distinto y a un tratamiento terapéutico prolongado.
En conjunto, estos hallazgos resaltan el potencial terapéutico de la inhibición de miR-148 para atenuar la progresión de la aterosclerosis y promover la estabilización de la placa, aunque todavía se requieren más experimentos con este tipo de moléculas para su posible aplicación en este campo.



