Escolano propone abordar la reforma de las pensiones de forma gradual y sobre la base del Pacto de Toledo

Valeriano Gómez pide descargar a las cotizaciones de gastos impropios y José Blanco pide una reforma que dé al país «certidumbre y confianza»

El exministro de Economía Román Escolano se ha mostrado partidario de una reforma «integral» del sistema de pensiones, pero ha aconsejado abordarla con «gradualidad», sustentada en un amplio acuerdo entre los grandes partidos y sobre la base de los trabajos alcanzados por la Comisión del Pacto de Toledo.

Así lo ha señalado Escolano durante su intervención en el coloquio sobre el futuro del ahorro y la inversión en España que ha mantenido con José Blanco, exministro de Fomento y director ejecutivo de Acento Asuntos Públicos, y Valeriano Gómez, exministro de Trabajo y consejero de Duro Felguera.

Este debate se ha celebrado con motivo de la presentación del II Observatorio del Ahorro y la Inversión en España, organizado por Bestinver y el IESE en colaboración con Europa Press.

Según Escolano, el ejemplo francés ha puesto en evidencia que cuando en el ámbito de las pensiones se va a una «reforma de shock», la iniciativa está condenada al fracaso, por lo que ha abogado por abordarla de forma «integral», pero con «gradualismo», amplio consenso de los grandes partidos y sobre la base de los trabajos de la Comisión del Pacto de Toledo, que estuvo a punto de llegar a un acuerdo sobre este asunto en la pasada legislatura.

El que fuera ministro de Economía en el año 2018 ha puesto sobre la mesa la reciente iniciativa irlandesa en materia de pensiones, que consiste en un sistema de ahorro automático con aportación de la empresa y estímulos fiscales para el trabajador, que se ha aplicado también en otros países como Reino Unido o Nueva Zelanda «con gran aceptación».»Me parece una iniciativa que debería ser estudiada», ha enfatizado.

De su lado Valeriano Gómez ha abogado por introducir cambios en el sistema, como aplicar más transparencia al mismo, que se tenga en cuenta toda la vida laboral a efectos de computar la pensión, que la edad efectiva de jubilación se acerque a la ordinaria, descargar las cotizaciones de los costes no asociados a las pensiones contributivas e introducir más contributividad.

Según sus cálculos, eliminando los gastos impropios (de gestión o de las pensiones no contributivas), el déficit del sistema estaría más cerca del 0,5% en vez del 1,6% actual.

De su lado, José Blanco ha instado a los grupos políticos a ponerse de acuerdo a partir del pacto al que casi se llega en el Pacto de Toledo en la anterior legislatura para conseguir una reforma que dé al país y a los ciudadanos certidumbre y confianza.

En este punto, Gómez también ha señalado la importancia de que haya una «fluidez alta» en el diálogo social, que es uno de los pilares sobre los que abordar las reformas en materia laboral, y ha pedido no proyectar una imagen de «falta de solidez» del sistema español de pensiones que, en su opinión, no es incompatible con instrumentos complementarios.

«El Gobierno acierta en aglutinar en un Ministerio competencias en pensiones públicas y previsión social complementaria», ha enfatizado.

EL AHORRO DE LOS ESPAÑOLES

Respecto al ahorro, Escolano ha resaltado que en los últimos años la posición financiera española frente al exterior ha mejorado mucho, y ha destacado que el país ha sido capaz de tener superávit por cuenta corriente en los últimos años. «Esto no era normal en la economía española. Son contados los países en Europa con superávit exterior», ha enfatizado.

Por ello, considera que desde hace cinco años los niveles de ahorro son «adecuados», si bien desde el punto de vista del ahorro individual cree que la respuesta está más «matizada».

De su lado Valeriano Gómez cree que aunque ahora España está más alineada con otros países en cuanto a inversión en productos de ahorro, hasta hace poco no era sí por la «hipertrofia» de la inversión inmobiliaria, y aunque ha dejado claro que no es contrario a destinar una parte del ahorro a la vivienda, cree que dedicar seis o siete años de la renta familiar a comprar una casa «no es razonable».

En este punto, Escolano ha remarcado que el hecho de que el 80% de las familias españolas sean propietarias de vivienda «también tiene sus ventajas sociales» y «no ha venido mal al país».

Por último, José Blanco ha hecho hincapié en que para una parte de la población la vivienda se ha convertido en un producto «inaccesible», al igual que el precio de los alquileres en las grandes ciudades, y ha pedido abordar esta situación de manera decidida.