El PP se prepara para forzar una votación del Congreso en marzo rechazando la tributación del salario mínimo
Busca dejar en minoría al PSOE antes de que el Gobierno pueda vetar las proposiciones de ley
El PP quiere forzar en marzo una votación en el Pleno del Congreso para rechazar la tributación del salario mínimo, un asunto que divide al Gobierno de coalición y en el que el PSOE se puede quedar en minoría.
La grieta en el Ejecutivo se abrió hace una semana, cuando se aprobó la subida del salario mínimo a 1.184 euros mensuales y, a renglón seguido, se conoció que esa cifraba dejaba de estar exenta del Impuesto de la Renta (IRPF). En plena rueda de prensa del Consejo de Ministros, la vicepresidenta Yolanda Díaz criticaba esa decisión de Hacienda y aseguraba haberse enterado por la prensa.
La oposición encontró un filón en esa discrepancia y en la siguiente sesión de control recayeron sobre la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, la socialista María Jesús Montero, pidiendo explicaciones por esa medida fiscal y buscando las contradicciones en el seno del Ejecutivo.
EL PSOE AVISA DE QUE, SIN IRPF, EL SMI NO SUBIRÁ MÁS
Desde el PSOE insisten en que el salario mínimo ha alcanzado unos parámetros que hacen imprescindible su tributación porque, de no hacerlo, quedaría «tocado de muerte» y ya no se podría seguir elevando anualmente. Alegan que está en riesgo la política fiscal y que este debate sólo favorece a los partidos que quieren acabar con los impuestos.
Pero Sumar, el socio minoritario del Gobierno, insiste en que el SMI debe seguir estando exento por razones de justicia social, una idea que comparten los aliados parlamentarios de la izquierda, como Podemos, ERC y Bildu.
Tanto Sumar como el PP y Podemos registraron sendas proposiciones de ley para dejar exento el salario mínimo, pero estas iniciativas legislativas llevan un calendario al ralentí ya que primero deben ser examinadas por el Gobierno, que tiene un mes para decidir si permite su debate o votación o impide su tramitación ejerciendo la capacidad de veto que le otorga la Constitución.
EL INFIERNO FISCAL
En este contexto, el PP ha decidido acelerar las cosas y forzar una votación en marzo para que el Pleno del Congreso decida si quiere o no que el salario mínimo pague IRPF. A tal fin, ha registrado una interpelación para debatir la próxima semana con la vicepresidenta Montero y, en la siguiente sesión plenaria, ya en la semana del 11 de marzo, defenderá una moción sobre lo que denomina «el infierno fiscal que sufren los españoles».
Lo previsible es que en esa moción incluya un punto en el que se rechace la tributación del salario mínimo, y ahí podría encontrar el voto a favor de Vox y Junts, pero también de Sumar y los aliados de izquierda del Gobierno, dejando al PSOE casi en soledad.