El PP pedirá el lunes explicaciones a Pesquera sobre el «injustificado» cese del director del Banco de Sangre
Se pregunta si puede ser una «vendetta personal» del consejero hacia Arroyo o un intento de colocar a alguien «con el carné del PSOE»
El PP pedirá explicaciones en el Pleno del Parlamento de Cantabria del lunes, día 26, al consejero de Sanidad, el socialista Raúl Pesquera, por las razones del cese del director del Banco de Sangre y Tejidos, José Luis Arroyo, ya que lo ve «injustificado» y «sospechoso»; teme que sea «arbitrario» y se pregunta si puede ser una «vendetta personal» o un intento de colocar en su lugar a alguien con «el carné del PSOE».
En las tres preguntas que planteará el PP en el Pleno sobre este asunto, además de las razones que justifican el cese, los populares quieren conocer qué evaluación del rendimiento y de la competencia se ha realizado del director del Banco de Sangre y también qué criterios se van a valorar para elegir al sustituto de Arroyo al frente del Banco de Sangre.
Así lo ha explicado en rueda de prensa el portavoz de Sanidad del grupo parlamentario popular, César Pascual, quien ha censurado que Pesquera siga «sin dar razones» sobre el cese de quien estado durante 16 años en este cargo –con consejeros de Sanidad de distinto signo político– y tiene una carrera «plagada de éxitos». Por ello, cree que debe dar explicaciones sobre la decisión «con luz y taquígrafos».
«Debe explicar lo que no ha dicho», ha insistido el diputado popular, que ha denunciado la «habitual falta de transparencia y oscurantismo» del Gobierno PRC-PSOE.
DISTINTAS HIPÓTESIS
Pascual ha realizado en la rueda de prensa algunas posibles hipótesis o preguntas sobre las razones de este cese, que, según ha dicho, se materializará «en unos días».
Respecto a la posibilidad de que el cese de Arroyo esté relacionado con una intención de Pesquera de colocar en este puesto a un «acólito» del PSOE, ha afirmado que «los antecedentes no son precisamente muy halagüeños» a la vista de lo ocurrido con el nombramiento como directora del Observatorio de Salud Pública de Cantabria a Norak Cruz, cuyo currículo –dice– no se ha publicado y de la que, según ha dicho, solo se sabe que es médico de Atención Primaria y que fue de número 16 en la candidatura de los socialistas. Además, recuerda que ésta sustituyó a un epidemiólogo que estuvo al frente de la pandemia.
También se ha preguntado si detrás de la decisión de Pesquera puede haber algún tipo de «vendetta personal» hacia Arroyo por algo ocurrido durante la etapa en la que el ahora consejero era gerente de la Fundación Valdecilla, de la que depende también el Banco de Sangre.
Pascual ha censurado que Pesquera se limitó a comunicar al Patronato de la Fundación Valdecilla el cese de Arroyo pero no lo sometió a la deliberación de este órgano.
Por todo ello, cree que este cese, que entiende que por el momento carece «de la obligada motivación», puede ser una muestra más del comportamiento «sectario» que, a su juicio, muestra Pesquera desde su llegada al cargo de consejero de Sanidad hace seis meses, un periodo, según ha indicado, lleno de «polémicas».
Pascual ha opinado que el «inesperado» cese del director del Banco de Sangre «sorprende» también por el momento en que se ha producido, cuando está «en pleno desarrollo» el proyecto de terapia celular y que tenía al doctor Arroyo como «uno de los artífices» al estar involucrado en el mismo «desde los primeros pasos».
RAZONES «MOTIVADAS»
El diputado del PP ha señalado que para el tipo de cargo que ostenta Arroyo el consejero no puede alegar solo como razón «pérdida de confianza», tal y como han demostrado, según ha dicho, diversas sentencias del judiciales, sino que tiene que motivar las razones y demostrar la veracidad de las mismas.
Esta motivación consiste en expresar las «razones de oportunidad basadas en la confianza y en la idoneidad» que le llevaron al nombramiento y ahora, al parecer, ya no concurren. Además cree que el consejero debería explicar cuándo ha ocurrido una «discrepancia conceptual y técnica» con Arroyo que puede justificar su cese.
De hecho ha indicado que cuando se publique este cese, éste se puede recurrir por el propio Arroyo –algo que desconoce si éste lo va a hacer pues es una «cuestión personal»– o por cualquier persona que se sienta afectada.