El PP «no va a tolerar más paripés» sobre el tema de los trenes e insiste en pedir «responsabilidades políticas»

Dice que Revilla «vive en la inopia»: «Si hubiera ido a los ministerios la mitad que a las televisiones no estaríamos en este chiste de Gila»

El PP ha advertido al Ministerio de Transportes y al Gobierno de Cantabria que «no va a tolerar más paripés, aspavientos y falsa indignación» sobre el problema de los trenes y les ha pedido que digan «la verdad» y se depuren «responsabilidades políticas» tanto en el Gobierno central como en el bipartito de un Miguel Ángel Revilla que «vive en la inopia» y «no se enteró del gigantesco engaño» porque «no hace su trabajo».

Así lo ha reclamado este miércoles, en rueda de prensa, la presidenta autonómica del PP, María José Sáenz de Buruaga, quien, de cara a la reunión que se celebra esta tarde entre el Ministerio, Renfe, Adif y los gobiernos de Cantabria y Asturias, ha reclamado al departamento que dirige Raquel Sánchez que aclare lo ocurrido, cuándo conoció el error en el cálculo de las dimensiones y por qué no actúo entonces, qué consecuencias económicas y de retraso va a suponer y le ha pedido «celeridad» en las soluciones.

Además, se ha preguntado si en la reunión de hoy «van a volver a intentar engañar» a los cántabros en los plazos «por interés electoral». Y es que considera que «eso de que los trenes estarán en circulación a finales de 2024 es un cuento que no se va a cumplir».

«No nos han dicho la verdad y siguen sin decírnosla», ha afirmado Buruaga, quien ha insistido en reclamar «responsabilidades políticas» porque «las hay» tanto en el Gobierno central –por esta «burla y engaño monumental»– como en el Ejecutivo regional liderado por Revilla «por su dejación, pasividad e incompetencia». «Viven en la inopia y no han hecho seguimiento de nada», ha aseverado Buruaga, que ha señalado no solo al presidente, sino también a otros miembros del Ejecutivo.

La dirigente popular ha indicado que esta inversión para dotar a Cantabria de los nuevos trenes de CV era una tema «de altísimo nivel político» y cree que «intentar despacharlo con un cese preventivo de unos técnicos o empleados intermedios ajenos a la Dirección es poner el listón muy bajo ante semenjante estropicio» que ha causado un «daño grave» a la imagen de la comunidad y que, además, supone, que la llegada de los trenes se retrase «otra legislatura».

Como prueba del alcance político de este tema, ha indicado que la secretaria de Estado de Infraestructuras, Isabel Pardo de Vera, era presidenta de ADIF; el jefe de gabinete del anterior ministro del área, José Luis Ábalos, estaba en el Consejo de Administración de Renfe, y esta inversión en los trenes de Cercanías estaba en el «papeluco» (el documento suscrito el compromiso en materia de infraestructuras que el PRC suscribió con el PSOE a nivel nacional).

Es por ello por lo que ha criticado que el PRC «después de pedir ceses al más alto nivel se hayan conformado con la nada» y sea, a su juicio, el único que se cree que en el Gobierno central y en el Ministerio no sabían nada de este error cuando cree que «es más que evidente que lo sabían hace más de dos años» el error y que no iban a poder suministrar los trenes en plazo.

Buruaga cree que «lo primero» que debe aclarar el Ministerio es cuando CAF, la empresa encargada de fabricar los trenes, alertó del error, cómo se «ocultó y mantuvo el engaño» y «no avanzó en las soluciones», quizás porque «convenía» no hacerlo y había otras prioridades.

Además, ha pedido que se explique si la inversión iba a contar con financiación europea a través de un préstamo del Banco Europeo de Inversiones que finaliza en diciembre de 2024, un plazo «imposible de cumplir». Por ello, quiere conocer qué se va a hacer o si existe riesgo de que se pierdan 150 millones de financiación europea.

Buruaga cree que «Cantabria está completamente desasistida porque ni el Gobierno central ni el el Gobierno regional están a lo que tienen que estar».

«Se llevan nuestros trenes a Cataluña, se diseñan trenes que no caben por los túneles y nos engañan como a chinos durante dos años porque Pedro Sánchez y sus socios saben que las protestas de Revilla son solo de boquilla y saben que al final traga con todo y lo justifica todo», ha afirmado Buruaga quien cree que si el presidente regional «hubiera ido a los ministerios la mitad de las veces que va a las televisiones hoy no estaríamos hablando en Cantabria de este chiste de Gila».

Buruaga ha advertido que el PP «no va a dejar piedra sin remover» para aclarar este tema y ya ha dado instrucciones a la diputada nacional por Cantabria Elena Castillo que solicite al Minsterio todos los expedientes del contrato, las actas de todas las reuniones y las comunicaciones «de ida y vuelta» que ha mantenido con el Gobierno de Cantabria sobre este tema.

Además, va a solicitar en el Congreso y en el Senado la comparecencia de la ministra y también que den explicaciones los responsables de Renfe y ADIF.