El PP navarro tiende la mano a Chivite para que sus políticas «no dependan» de Bildu
Censura que el PSOE de «botes de alegría» cuando dependerá de un fugado, de supremacistas y un partido heredero de quien sustentó el terrorismo
PAMPLONA, 14
El portavoz del Partido Popular de Navarra (PPN) en el Parlamento de Navarra, Javier García, ha asegurado que el nuevo gobierno de Chivite va a ser «continuista en las concesiones a los abertzales y en la inacción en temas fundamentales». Por eso le ha llamado a «reconsiderar sus políticas» y le ha tendido la mano para que sus políticas «no dependan, o al menos estén lo más alejadas posible, de la izquierda abertzale».
En su intervención en el debate de investidura de María Chivite, García ha asegurado que el «desacuerdo» en las negociaciones de gobierno ha sido «sobre el reparto de cargos» y ha asegurado que se ha «retrasado» la investidura por la convocatoria de elecciones generales.
García ha censurado que el PSOE y el PSN no ganan las elecciones pero dan «botes de alegría» cuando son conscientes de que «su poder va a depender de la voluntad de un fugado de la justicia, de un grupo de supremacistas que buscan la ruptura de España y de los representantes políticos de un partido soberanista heredero de aquellos que sustentaron al terrorismo».
PSN, COOPERADOR NECEARIOS PARA BLANQUEAR A BILDU
El dirigente del PPN ha recordado el «cheque en blanco» que ofreció EH Bildu a Chivite ante las desavenencias con Geroa Bai y ha afirmado que «está claro que los abertzales tienen mucho interés en que la señora Chivite siga al mando» porque está contribuyendo a «blanquear a Bildu» y está «propiciando» que «crezca, elección tras elección». «Ustedes son el cooperador necesario para que una fuerza disgregadora e inmoral, por no condenar el terrorismo, cada vez tenga más poder y fuerza política», ha sentenciado.
Javier García ha destacado que el PPN hará esta legislatura una «oposición constructiva, queremos ser útiles a los navarros». Por un lado, «poniendo pie en pared ante las políticas sectarias e ideológicas», pero también «trayendo a debate todas aquellas propuestas que nos acerquen a la Navarra en la que nos gustaría vivir y que querríamos poder construir».
El PPN, ha dicho, será «dique de contención» y tratará de traer «moderación, consenso y sentido común», ha dicho. Así, ha defendido que «sean las familias las que elijan el modelo y el centro educativo de sus hijos en libertad» y ha abogado por «encaminarnos hacia una Navarra donde todo el mundo tenga acceso a una sanidad excelente cuando lo necesite y en la que se cree empleo de calidad y no se machaque a impuestos a los ciudadanos».
El dirigente popular ha acusado a Chivite de no tener «ningún proyecto para llevar a Navarra a lo más alto, para crear empleo o para atraer inversiones» sino un «proyecto personal». No obstante, se ha comprometido a realizar una «política útil, comprometida y con mayúsculas» y a valorar cada propuesta que se traiga al Parlamento «en base a sus contenidos». «Queremos ser útiles y constructivos porque es lo que los navarros merecen y nos están demandando», ha añadido.
En materia de Salud, ha responsabilizado de haber «cronificado todos los males de la sanidad pública de Navarra». «Hemos pasado de ser la envidia de toda España a la tercera comunidad con más lista de espera para la primera consulta, más de cincuenta mil personas», ha lamentado. De la misma manera, ha afirmado que «los médicos ya no quieren venir a Navarra».
Ha reprochado que haya ofrecido la cartera de Salud a Geroa Bai «porque no quiere tener que afrontar compromisos para el mantenimiento del sistema sanitario cuando lleguen los recortes que va a imponer el pacto de estabilidad fiscal europeo tras la ingente deuda que deja el sanchismo».
En cuanto a Educación, ha exigido al futuro Ejecutivo foral que «no se meta en las decisiones que competen a las familias» y ha reclamado «respeto hacia el modelo y el tipo de educación que elijan las familias». «Ya basta de demonizar modelos educativos como la educación diferenciada que es perfectamente legítima», ha manifestado.
Por otro lado, Javier García ha asegurado que el anterior Gobierno fue un «lastre» para la economía, con una presión fiscal «1,3 puntos por encima de la media nacional». Ha apostado por «bajadas de impuestos, como los tramos del IRPF, o la reducción del de sociedades al 24%, aplicando un tipo del 20% para las pequeñas empresas y un 15% para las de nueva creación». También por «la eliminación del impuesto de sucesiones y donaciones de segundo grado y el de patrimonio».
En cuanto al desempleo, ha afirmado que «Navarra tiene un 18,16% más de personas paradas desde que Chivite es presidenta», según la EPA. «Chivite comenzó la legislatura como la presidenta de la Comunidad con menor tasa de paro y la ha terminado situando a Navarra en la séptima posición», ha reprochado García, que ha advertido de que la Comunidad foral «está perdiendo competitividad».
Por otro lado, ha criticado que la cartera de Vivienda la vaya a ostentar Contigo-Zurekin, que «no respetan la propiedad privada y cuyas soluciones colectivistas no van a hacer nada por paliar el problema del desempleo en nuestros jóvenes».
En materia de infraestructuras, ha reclamado el impulso de la segunda fase del Canal de Navarra, ha lamentado que el Tren de Alta Velocidad es «el gran olvidado» y ha criticado que la A-15 «sea ahora una prioridad».