Calvo aboga por contar en mayor medida con los ayuntamientos para que las mujeres puedan «salir de la violencia»

CÓRDOBA, 2

La secretaria de Igualdad del PSOE y vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, ha abogado, en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Córdoba (UCO), por «reforzar» todos los «instrumentos» disponibles, apoyándose en mayor medida en los ayuntamientos, para que las mujeres víctimas de malos tratos que no se atreven a denunciar sí que den pasos, al menos, para «salir de la violencia» machista que sufren.

En declaraciones a los periodistas antes de intervenir con la alcaldesa de Córdoba y candidata socialista a la reelección, Isabel Ambrosio, en un acto del PSOE sobre igualdad, Carmen Calvo ha recordado que ha sido el Gobierno de Pedro Sánchez el que ha «devuelto» a los ayuntamientos «las competencias de políticas preventivas, educativas y reactivas para la igualdad entre hombres y mujeres».

En este sentido, ha afirmado que «es muy importante, particularmente pensando en la seguridad de las mujeres y en la violencia machista, que los ayuntamientos, con los Servicios Sociales, con recursos humanos y económicos suficientes puedan servir de lugares de escucha y ayuda para las mujeres», sobre todo porque «la inmensa mayoría de las mujeres que finalmente son asesinadas, de las que llevamos este año, todas menos una, no habían denunciado» previamente a quien luego las mató.

Eso significa, según ha señalado la vicepresidenta del Gobierno, que «hay que reforzar mucho todos los instrumentos que seamos capaces de poner a punto para que las mujeres den el paso de salir de la violencia y que lo hagan de la manera que ellas consideren», pues, «si una mujer no se atreve a denunciar directamente quizás si lo haga yendo a los Servicios Sociales del Ayuntamiento».

Entiende Carmen Calvo que en dicho ámbito de la Administración local las mujeres víctimas de la violencia de género «sí pueden ser escuchadas, y ser escuchadas con oído técnico, capaz de deducir lo que les está pasando y de empezar a ayudarlas», con el objetivo de que dicho proceso concluya «en una denuncia que nos permita reaccionar también desde el punto de vista jurídico penal».

APOYO A ISABEL AMBROSIO

Por eso, según ha insistido, «es muy importante la labor de los ayuntamientos» y, en el caso de Córdoba, según ha subrayado, también es importante contar en la Alcaldía con «una mujer comprometida, en toda su trayectoria política, con el feminismo y con la lucha» en favor de «los derechos, las libertades y las oportunidades de las mujeres», lo cual, según ha opinado, supone «una extraordinaria garantía de convivencia para la ciudad».

En este sentido, Calvo ha opinado que el «futuro» de Córdoba pasa por que «los hombres y mujeres de Córdoba tengan cada día más empleo, y más capacidad creativa e innovadora para quedarse en su ciudad y generar vida y economía», lo cual requiere también «mejorar mucho las condiciones de las mujeres», añadiendo, en este sentido, que sabe de «la sensibilidad y la preocupación de Isabel por las mujeres que tienen problemas, no solo de seguridad, sino también de subsistencia».

Ello ha llevado a la secretaria de Igualdad del PSOE a decir que espera que Ambrosio «siga gobernando en Córdoba» tras las elecciones municipales del próximo 26 de mayo, señalando que la aprecia y respeta «mucho políticamente», pues ha demostrado ser «muy valiente y responsable» con respecto a «su ciudad», donde ha venido gobernando en este mandato municipal «con una complejidad extrema», en coalición con IU y con apoyo externo de Ganemos Córdoba.

LA ALCALDESA DE CÓRDOBA

Por su parte y en declaraciones a los periodistas, la alcaldesa de Córdoba y candidata socialista a la reelección, Isabel Ambrosio, ha señalado que la lucha por la igualdad ha sido para ella este mandato «una prioridad» que, además, «debe marcar la agenda política y pública», en cualquier caso.

De hecho, en su opinión, el resultado de las elecciones generales del pasado domingo demuestra que «este país afronta ya con mucha naturalidad y con mucha madurez el feminismo, sobre todo porque hablar de feminismo es hablar de progreso y de modernidad», lo cual, según ha insistido, debe formar parte de «la agenda política y pública», teniendo en cuenta que ésta «no se puede hacer sin contar con los ayuntamientos», que, como «administración más cercana», deben tener como «prioridad lanzar políticas transversales, políticas que sumen» para la igualdad.