El partido de Ouattara le señala como «el mejor colocado» de cara a su nominación a un tercer mandato
El partido gubernamental de Costa de Marfil ha destacado este lunes que el presidente del país, Alassane Ouattara, «es el mejor colocado» de cara a una posible candidatura a un tercer mandato, tras el fallecimiento a principios de julio del primer ministro y candidato a la Presidencia, Amadou Gon Coulibaly.
Ouattara aseguró en marzo durante una comparecencia ante el Parlamento que no se presentaría a la reelección y, si bien el repentino fallecimiento de Gon Coulibaly ha vuelto a poner su nombre sobre la mesa, el presidente no se ha pronunciado al respecto.
Sin embargo, el director ejecutivo de la Agrupación de Houphouetistas por la Democracia y la Paz (RHDP), Adama Bictogo, ha manifestado en declaraciones a la emisora Radio France Internationale que Ouattara «es el mejor colocado para hacer frente al candidato (Henri Konan) Bédié en la primera vuelta».
Así, ha argumentado que el mandatario «sigue siendo el cimiento de la unidad de la RDHP» y que su candidatura «evitaría una guerra de delfines «, una vez sacado de la ecuación Gon Coulibaly, quien había sido la mano derecha de Ouattara durante muchos años.
Por contra, fuentes de la Presidencia citadas por Radio France Internationale han asegurado que el presidente «aún duda» y que se sigue debatiendo la posibilidad de que el ministro de Defensa, Hamed Bakayoko, quien debería ocupar provisionalmente el cargo de primer ministro, sea el candidato.
Desde el Frente Popular Marfileño (FPI), el partido del expresidente Laurent Gbagbo, han afirmado ya que «le recordarían (a Ouattara) hasta el día de la votación que no tiene palabra y que reniega de su propia Constitución» en caso de que finalmente se presente a las urnas.
El propio Bictogo reconoció el 10 de julio que el presidente había dicho que respetaría el límite de los dos mandatos que contempla la Carta Magna, si bien arguyó que ahora «la situación es diferente». Así, incidió en la necesidad de «revisitar» la decisión de Ouattara.
El fallecimiento de Gon Coulibaly tuvo lugar en un momento delicado, a falta de pocos meses para las elecciones. Los partidos de los expresidentes Gbagbo y Bédié, principales rivales de Ouattara, anunciaron en mayo que aunaban esfuerzos de cara a la cita con las urnas.
El propio Gbagbo podría ser candidato después de su absolución en el Tribunal Penal Internacional (TPI) de los cargos que se le imputaban en relación con la escalada de violencia tras las elecciones de 2010, si bien está a la espera de la apelación presentada por la Fiscalía.
Muchos marfileños temen que otra polémica electoral pueda conducir a una nueva oleada de violencia como la registrada tras los comicios de 2010, cuando Gbagbo se negó a reconocer la victoria de Ouattara, que remachó una década turbulenta en la que Costa de Marfil tiró por tierra años de avance próspero y estable.