El Parlamento cántabro defiende liberalizar las patentes de las vacunas aunque sin apoyo de la oposición
La mayoría de PRC y PSOE saca adelante esta iniciativa con la intención de que las dosis sean accesibles en todo el mundo
El Parlamento de Cantabria se ha posicionado en el Pleno de este lunes a favor de la liberalización de las patentes de las vacunas contra el coronavirus con el objetivo de aumentar la producción, promover la inmunización global y que las dosis sean accesibles en todo el mundo.
Así, se ha aprobado una proposición no de ley (PNL) promovida por el grupo parlamentario socialista mediante la que el Hemiciclo insta al Gobierno de Cantabria a solicitar al Gobierno de España que adopte y defienda ante la Comisión Europea y la Organización Mundial del Comercio un posicionamiento favorable a la liberalización temporal de las patentes, permitiendo una colaboración que aumente y acelere la disponibilidad, accesibilidad y asequibilidad de las vacunas.
Esta iniciativa ha salido adelante solo con el apoyo de los grupos que sustentan al Gobierno de Cantabria, PRC y PSOE, que suman mayoría en la Cámara, mientras que toda la oposición -PP, Ciudadanos (Cs) y Vox- ha votado en contra.
Regionalistas y socialistas han apoyado la postura que defiende el Gobierno de España y que, según han dicho, ya han adoptado «más de 100 países», con el objetivo de «acelerar el proceso de producción» de las vacunas y que se conviertan en un «bien común global accesible a todo el mundo», evitando «más contagios, más muertes y nuevas variantes».
En este sentido, las diputadas Ana Obregón (PRC) y Noelia Cobo (PSOE) han explicado que, además de la vertiente de cooperación y solidaridad hacia los países menos desarrollados, está el hecho de que si no se actúa en ellos se daría una situación «altamente peligrosa para todos», porque si se permite que el virus se propague «mutará una y otra vez, como está ocurriendo, y las vacunas podrían llegar a perder su efectividad».
«Entonces volveremos a estar en peligro y la pandemia seguirá avanzando», ha sostenido la socialista, que ha pedido suspender por ahora las patentes ya que se puede hacer en circunstancias excepcionales. «Si ésta no lo es, apaga y vámonos», ha sentenciado.
Cobo ha apuntado que en la mayoría de países desarrollados el porcentaje de vacunados es ya superior al 25 por ciento y se prevé alcanzar la inmunidad comunitaria en los próximos meses, mientras que nueve de cada diez personas del sur global no recibirán la vacuna en 2021, según Médicos Sin Fronteras.
Desde la oposición, PP y Cs se han mostrado de acuerdo con la necesidad de vacunar cuanto antes a toda la población y llegar a los países en vías de desarrollo, pero han considerado que para ello «no es necesario» liberalizar las patentes, lo que creen que provocaría que las farmacéuticas no investiguen al tener menor rentabilidad.
El popular César Pascual ha subrayado que «el problema más importante» en la distribución es «la geopolítica, no la rivalidad entre farmacéuticas», así como las materias primas -se hacen multidosis porque «no existe capacidad» para aumentar la producción y hacerlas individuales- y las complejas infraestructuras que se necesitan para fabricar las dosis, por lo que aunque se liberaran las patentes no sería posible que otras empresas las pusieran en marcha en poco tiempo, ha explicado.
Por ello, tanto él como el diputado de Cs Diego Marañón han apostado por alternativas como apoyar la preparación de los países en desarrollo para la vacunación o «eliminar barreras» para la exportación.
Por último, desde Vox Armando Blanco ha opinado que «expropiar» las patentes es una práctica «típica de regímenes comunistas» y que se quiere llevar a cabo para «ocultar la desastrosa negociación» de la UE y de Pedro Sánchez con las farmacéuticas, además de que supondría «desincentivar la investigación» por parte de esta industria, porque «solo la búsqueda de beneficios puede asegurar la búsqueda de medicamentos y nuevas vacunas».
OFICINAS COMARCALES
Por otro lado, el Pleno ha rechazado dos iniciativas presentadas por PP y Cs en torno al funcionamiento de las oficinas comarcales agrarias de Cantabria, que al contrario que la PNL anterior, han contado con el apoyo de toda la oposición pero con el rechazo de PRC y PSOE, que han alegado que con la plantilla actual y las tareas que realizan ya «garantizan una atención de calidad».
Los populares pedían mantener y garantizar la actividad y atención pública de las oficinas a través de empleados públicos, eliminando la externalización de sus funciones y trabajadores y dotando y cubriendo los puestos vacantes de personal de forma inmediata, mientras que la formación naranja reclamaba retirar en ellas la cita previa hasta que estén dotadas del personal que figura en la RPT.