El Mundo y El Español estudian demandar a la Policía por denuncia falsa tras detener a dos periodistas en Ferraz
El Mundo y El Español estudian demandar a la Policía Nacional por detención ilegal y denuncia falsa después de que la Policía Nacional detuviera el miércoles a dos de sus periodistas en la protesta contra la amnistía en la calle Ferraz, según han informado los mencionados diarios.
Los dos periodistas fueron detenidos en la madrugada de este jueves, según se recoge en el atestado policial, al ser sorprendidos por agentes de Policía Nacional lanzando objetos contra los agentes desde una barricada en la calle Juan Álvarez de Mendizábal de Madrid.
Según las fuentes policiales, los dos redactores trataron de «burlar» la acción policial ocultándose en un portal de la mencionada calle, donde fueron detenidos junto a una tercera persona. La protesta coincidió con la primera sesión plenaria en el Congreso de la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.
Estos dos periodistas fueron puestos en libertad «a las pocas horas», tras la formalización del correspondiente atestado policial que dará lugar a un procedimiento en el que, según la Policía, «podrán ejercer todos los derechos de defensa y alegar cuanto consideren».
Por su parte, estos medios exponen que, tras la sucesión de cargas en la calle Marqués de Urquijo, los periodistas se desplazaron acompañados por otros dos compañeros para cubrir los disturbios tras el lanzamiento de petardos y cargas policiales.
Ya una vez que las protestas se trasladaron a calles aledañas, los informadores se encontraron en medio de dos cargas de Policía que se produjeron después de que algunas personas arrojasen cubos de basura al suelo, intentando construir barricadas.
Asimismo, tanto El Mundo como El Español recogen que los reporteros detenidos estaban grabando en ese momento cómo los manifestantes más radicales quemaban varios contenedores en la vía pública y cómo les lanzaban algunos vecinos desde las ventanas agua.
Al filo de las 23.00 fue la última escena que los periodistas pudieron grabar ya que, instantes después, fueron detenidos «arrastrados por la masa» y vieron salida para refugiarse en el portal de una vivienda «invitados por uno de los moradores de la misma» avisando al mismo tiempo a sus compañeros de que se encontraban allí, expone el texto.
Al hilo, El Mundo recoge que minutos después un individuo cubierto por una braga golpeó la puerta para que le abrieran afirmando ser policía pero «sin mostrar ningún tipo de identificación» por lo que el residente optó por no abrir.
Sin embargo, accedieron a las zonas comunes del inmueble identificándose como policías. Así, los periodistas enseñaron sus acreditacionnes y, pese a la informar que eran reporteros y que estaban trabajando, fueron esposados y trasladados a la comisaría de la calle Leganitos.
Posteriormente fueron traslasados a la Brigada de Información en Moratalaz donde les informaron de que se encontraban investigados por la comisión de un delito de desórdenes públicos por, presuntamente, haber «lanzado lo que parecía ser una botella».
Por todo ello, ambos medios consideran la denuncia y detención de sus reporteros como un atentado y una violación en toda regla de la Libertad de prensa.