El jefe de Govern de Andorra fija retos de 2020: sostenibilidad, igualdad y desarrollo inclusivo

ANDORRA LA VELLA (ANDORRA), 31

El jefe del Gobierno de Andorra, Xavier Espot, ha afirmado este martes por la noche, en el tradicional mensaje de fin de año emitido por Andorra Televisió, que la sostenibilidad, la igualdad efectiva y el desarrollo inclusivo están «entre los objetivos más nobles» para 2020.

Espot ha asegurado que «las prioridades del Gobierno coinciden plenamente con estos tres objetivos», que dan respuesta a llamamientos de la ciudadanía.

Sobre 2019, ha destacado tres llamamientos a responder: «el clamor de los jóvenes que nos piden que actuemos ante la emergencia climática; el clamor de las mujeres que quieren que la igualdad vaya más allá de los grandes principios constitucionales y tenga una plasmación efectiva en su día a día. Y el clamor, por todas partes y también en nuestra casa, de personas trabajadoras que ven cómo el coste de la vida aumenta y su poder adquisitivo disminuye».

También ha defendido el compromiso contra el cambio climático y ha destacado que «2020 tiene que ser el año en que Andorra avance de forma clara y decidida hacia un modelo de desarrollo sostenible».

El compromiso se concreta en la transición hacia las energías renovables, la movilidad integrada sin emisiones y el respeto a la biodiversidad y el paisaje: «En este proceso el Gobierno quiere contar con la sociedad civil y el tejido productivo que, estoy convencido, sabrá aprovechar las oportunidades que representa el cambio de una economía lineal hacia la economía circular».

Sobre el segundo objetivo, se ha comprometido a continuar dando pasos decididos hacia la igualdad efectiva entre hombres y mujeres: para él, 2019 acaba «con una Andorra más feminizada», puesto que cuatro de las siete parroquias tendrán gobiernos liderados por mujeres y el Consell General (parlamento) también tiene mujeres en los puestos más relevantes: síndica y subsíndica.

COMPROMISO SOBRE VIVIENDA

«El Gobierno ha renovado su compromiso con los colectivos más desfavorecidos y también con aquellas personas que, a pesar de disponer de un trabajo estable, ven disminuido su poder adquisitivo como consecuencia de un aumento del coste de la vida que o siempre va aparejado de un incremento de los salarios», ha recordado sobre el tercer objetivo.

En este punto ha señalado la Ley de medidas urgentes sobre arrendamiento de vivienda y para mejorar el poder adquisitivo aprobada recientemente por el Consell General: «Vela por que los salarios y las pensiones más bajos crezcan por encima del coste de la vida».

«La falta de vivienda de alquiler y el consecuente aumento de los precios es en nuestra casa una verdadera emergencia social», y ha prometido seguir haciendo esfuerzos y orientando parte de la inversión pública con una función social.

Ha puesto el ejemplo de la plusvalía de la venta de las acciones de Avatel, 10 millones de los cuales se destinarán al fondo público-privado para la vivienda, con el fin de «rehabilitar y construir nuevas viviendas de alquiler a precio asequible».

Asimismo, ha apelado «al sentido de Estado y a la responsabilidad de los Comun (ayuntamientos) que se acaban de constituir para implementar medidas efectivas que contribuyan a paliar la falta de este tipo de viviendas».

PARTICIPACIÓN CIUDADANA

El jefe de Gobierno ha constatado que una de las diferencias de Andorra respecto a otros países desarrollados es la inclusión y la cohesión social, que hacen que «las personas de distintos niveles económico-culturales no vivan separadas y compartan espacios, aficiones y actividades de ocio».

Esta cohesión se atribuye, en parte, a la convivencia de los tres sistemas educativos: «Una riqueza que hemos de saber preservar y potenciar».

Pero también se ha explicado la cohesión social por otra razón: «Nunca hemos dejado de ser un pueblo, con una gran proximidad entre gobernantes y gobernados, y hemos sabido conservar la medida humana de las cosas».

«Es nuestro deber, el de los responsables políticos, el de los líderes de la sociedad civil y el de todos y cada uno de los ciudadanos, que esto continúe siendo así», ha añadido.

Espot ha recordado que se trabajan en un programa de participación ciudadana, con un objetivo: «Fortalecer los vínculos entre la ciudadanía y aquellos que, temporalmente, tenemos la responsabilidad de gobernar, hacer más abiertas y transparentes las instituciones públicas y, en definitiva, implicar mejor los ciudadanos en la toma de decisiones».

Y ha defendido que «es del interés de todos tener una ciudadanía activa, crítica y que se identifique con las instituciones del país, y para eso hace falta que la democracia vaya mucho más allá de limitarse a participar cada cuatro años en unas elecciones».

Así, ha reflexionado sobre la solución a una crisis de la democracia representativa en países occidentales: «No pasa, a mi entender, ni por una pretendida democracia directa ni por una respuesta de sesgo populista, sino, precisamente, por conseguir que el sistema democrático represente más y mejor el conjunto de la ciudadanía con todos sus matices».

Interpretando los resultados electorales de las generales de abril yh de las comunales (municipales) de diciembre, las tres fuerzas que conforman el Gobierno entienden que la ciudadanía pide «entendimiento y unidad desde la diversidad».

Además, Espot ha defendido que los retos de Andorra «son demasiado importantes para encararlos desde un solo punto de vista»: son, entre otros, el futuro de las pensiones, el sistema de salud pública, la diversificación de la economía y el acuerdo de asociación con la Unión Europea, ha dicho.

Para estos temas, el Gobierno trabaja para pactos de Estado con la oposición: «Si hay esta visión compartida sobre los objetivos y las líneas maestras, estoy seguro de que sabremos encontrar acuerdos en las medidas concretas que se tendrán que aplicar».

Y ha destacado la mejor manera de prevenir y combatir la desafección de la ciudadanía hacia las instituciones públicas: «Que todos seamos capaces de hacer prevalecer el interés del conjunto del país en determinadas cuestiones capitales y transversales».

Finalmente, ha manifestado que los andorranos han tenido siempre muy presente su «fragilidad»: ha puesto el símil de un mosaico, donde cada pieza tiene valor por si misma y a la vez contribuye a preservar el conjunto.

El jefe de Gobierno también ha recordado que los actos vinculados a la Cumbre Iberoamericana «permitirán mostrar al mundo y poner en valor lo que Andorra representa: la estabilidad, la seguridad, la libertad y la paz».