El IPC se dispara un 10,2% en Cantabria en marzo y un 3,3% respecto a febrero
El Índice de Precios de Consumo (IPC) en Cantabria se disparó un 10,2% en marzo en comparación con el mismo mes del año anterior, cuatro décimas más que la media nacional del 9,8%, su valor más alto en 37 años, concretamente desde mayo de 1985, según los datos definitivos publicados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Mensualmente, el IPC subió en Cantabria un 3,3%, tres décimas más que en España (3%).
Tanto interanual como mensualmente, los principales repuntes correspondieron en Cantabria a la vivienda y el transporte, cuyos precios se dispararon, más de un 30% en el primer caso y más de un 20% en el segundo, en comparación con marzo de 2021.
Así, en relación con el tercer mes del año pasado, en Cantabria subieron los precios en todos los sectores excepto en las comunicaciones, donde descendieron un -0,4%.
El principal incremento en comparación con marzo de 2021 correspondió a la vivienda, un 32,4%, por la subida de los precios de la electricidad y, en menor medida, del gasóleo para calefacción, mayor este mes que en marzo de 2021; seguida del transporte con un 20,4%, como consecuencia de que los precios de los carburantes y lubricantes para vehículos personales se incrementan este mes más que el año pasado.
Además se encarecieron los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas (6,9%) a causa de subidas generalizadas de todos sus componentes. Entre ellas destacan los incrementos de los precios del pescado y marisco, frente a la bajada registrada en 2021, y de las legumbres y hortalizas, la leche, queso y huevos y la carne, mayores este mes que en marzo del año anterior.
Igualmente costaron más los hoteles, cafés y restaurantes (4,4%) debido a que los precios de la restauración y los servicios de alojamiento aumentan este mes más de lo que lo hicieron en 2021; bebidas alcohólicas y tabaco, y vestido y calzado, ambos un 3,9%; el sector otros (2,9%); el menaje (2,5%); la medicina (1,1%); el ocio y la cultura (1%); y la enseñanza (0,5%).
MENSUAL
Por su parte, los precios en marzo subieron un 3,3% respecto a febrero, impulsados también por la vivienda (9,2%), a causa del incremento de los precios de la electricidad y, en menor medida, de los combustibles para calefacción; y el transporte (7,9%), por el aumento de los precios de los carburantes y lubricantes para vehículos personales. También influye en este grupo, aunque en menor medida, la subida de los precios de los automóviles y los servicios de mantenimiento y reparación de vehículos personales.
Fueron más caros que el mes anterior el vestido y calzado (4,7%), consecuencia del comienzo de la temporada de primavera-verano; hoteles, cafés y restaurantes (1,3%) por el incremento de los precios de la restauración y los servicios de alojamiento; los alimentos y bebidas no alcohólicas (1,1%) por subidas de precios generalizadas en todos sus componentes entre las que destacan las del pescado y marisco, la carne, las legumbres y hortalizas, la leche, queso y huevos y los aceites y grasas; bebidas alcohólicas y tabaco, y menaje (1%); y medicina y sector otros, ambos con un incremento del 0,4%.
En marzo solo se abarató el ocio y la cultura (-0,3%), por la bajada de los precios de los paquetes turísticos; mientras permanecieron invariables respecto a febrero los precios de las comunicaciones y la enseñanza.
De este modo, en el primer trimestre del año, los precios subieron en Cantabria un 3,3%, impulsados por el transporte (13,3%) y la vivienda (9,7%). Solo en dos sectores bajaron, el vestido y calzado (-11,9%) y el ocio y la cultura (-0,4%).
DATOS NACIONALES
En España, el IPC subió un 3% en marzo en relación al mes anterior y elevó de golpe su tasa interanual más de dos puntos, hasta el 9,8%.
Con el dato de marzo, que coincide con las cifras avanzadas a finales del mes pasado por Estadística, el IPC interanual encadena su decimoquinta tasa positiva consecutiva.
Según el INE, la subida interanual del IPC hasta el 9,8% se debe al repunte de los precios de la electricidad y del gasóleo para calefacción; al incremento de los precios de los carburantes para vehículos personales; al aumento de los precios de la restauración y los servicios de alojamiento, y al encarecimiento «generalizado» de los alimentos, especialmente del pescado y el marisco, de la carne, de las legumbres y hortalizas, y de la leche, el queso y los huevos.
Sin tener en cuenta la rebaja del impuesto especial sobre la electricidad y las variaciones sobre otros impuestos, el IPC interanual alcanzó en marzo el 10,7%, nueve décimas más que la tasa general del 9,8%. Así lo refleja el IPC a impuestos constantes que el INE también publica en el marco de esta estadística.
La inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumentó en marzo cuatro décimas, hasta el 3,4%, su valor más alto desde septiembre de 2008. De este modo, la subyacente se sitúa más de seis puntos por debajo de la tasa del IPC general.
En el último año, la calefacción, el alumbrado y la distribución de agua se han encarecido un 68,3%; los aceites y grasas han elevado sus precios un 32,1% y el transporte personal es un 19,3% más caro por el mayor coste de los carburantes. También registran alzas de dos dígitos los huevos y la leche (un 11% más caros que hace un año) y la carne de ovino y el pescado fresco y congelado, con repuntes del 10,1% en ambos casos.
EL IPC DISPARA SU TASA MENSUAL AL 3%
En tasa mensual, el IPC registró en marzo un incremento del 3% respecto a febrero, su mayor alza mensual en cualquier mes desde 2002, cuando se cambió la metodología de esta estadística para recoger mejor la evolución del mercado. Echando la vista más atrás, tomando series anteriores, el repunte mensual de marzo es el más elevado desde agosto de 1977.
En el tercer mes de 2022, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el 9,8%, más de dos puntos por encima de la de febrero. Por su parte, el indicador adelantado del IPCA avanzó un 3,9% en tasa mensual.