El Hospital La Luz (Madrid) incorpora un nuevo mamógrafo 3D para el diagnóstico precoz de la patología mamaria
El servicio de Radiodiagnóstico del Hospital La Luz de Madrid ha incorporado un nuevo mamógrafo tridimensional (tomosíntesis digital 3D), que permite localizar e identificar con mucha más precisión las lesiones en la mama.
El nuevo equipo logra imágenes de «alta calidad» y aporta una menor dosis de radiación y mayor confort para las pacientes, ya que la pala compresora posee una forma adaptada a la mama produciendo menor compresión sobre la misma.
«En tan solo tres segundos es capaz de obtener cada una de las proyecciones (imágenes en corte) y con ello disminuimos la posibilidad de movimiento de la paciente, por tanto, la necesidad de repetir la prueba cuando la paciente se mueve», ha dicho el radiólogo que creó la Unidad de Radiología de Mama del Hospital La Luz hace 9 años, doctor José Luis Pérez Aranda.
Estas condiciones, prosigue la directora de la Unidad Radiológica de Patología Mamaria del Hospital La Luz, Silvia Pérez Rodrigo, permiten mejorar «notablemente» la detección y el diagnóstico de cánceres de mama de forma precoz, evitando así que se extienda a otras partes del cuerpo (metástasis), con un mejor pronóstico y haciendo posible un tratamiento menos agresivo.
El nuevo mamógrafo va equipado con un software avanzado que permite un manejo y procesado de las imágenes obtenidas «más rápido, fiable y sumamente útil», especialmente en la toma de decisiones. «En casos de lesiones benignas nos permite dar un diagnóstico de benignidad con mayor seguridad disminuyendo con ello la tasa de rellamadas, es decir, la necesidad de realizar otras pruebas complementarias como pueden ser compresiones localizadas, ecografía, RM mamaria y en muchos casos biopsias, en lesiones que finalmente son benignas», ha añadido la experta.
Además, apostilla, se ha notado una «especial utilidad» en pacientes con mamas densas, uno de los «grandes desafíos», ya que en este tipo de mamas las lesiones pueden pasar desapercibidas o quedar ocultas o enmascaradas en el tejido mamario de la paciente, teniendo éstas mayor riesgo de padecer cáncer y de ser diagnosticado más tarde.
«También disponemos de un sistema de esterotaxia que nos permite localizar lesiones visibles por mamografía y realizar procedimientos intervencionistas como las biopsias de mama, con gran exactitud en la misma sala de exploración, así como su marcaje con un arpón o una semilla para ser extirpadas en quirófano», ha zanjado el doctor Pérez Aranda.