El Grupo Vithas cuenta con cuatro robots quirúrgicos para asegurar la calidad de vida tras cáncer de próstata
El Grupo Vithas cuenta con cuatro hospitales que disponen un robot quirúrgico Da Vinci, el cual permite llevar a cabo cirugías con una elevada precisión que mejora significativamente la calidad de vida de pacientes con esta patología.
Se trata de las Unidades de Cirugía Robótica de Hospital Vithas Sevilla, del Hospital Xanit Internacional, del Hospital Universitario Vithas Madrid Arturo Soria y del Hospital Vithas Vigo, donde los especialistas en el tratamiento del cáncer de próstata coinciden en las ventajas frente a la cirugía convencional.
Además de los resultados a nivel oncológico, la aplicación de la cirugía robótica permite mantener tanto la continencia urinaria como la capacidad de erección postoperatoria, dos efectos secundarios vinculados a la calidad de vida de los pacientes y cuyas tasas de preservación se sitúan entre las más altas entre las técnicas quirúrgicas. Los cuatro hospitales Vithas realizan estas técnicas de la mano de cirujanos con una dilatada experiencia, clave en el desarrollo y progreso de la propia cirugía robótica.
«El robot lo que hace es ejecutar lo que le dice el cirujano, es muy importante la experiencia del cirujano a la hora de poder lograr grandes resultados con la cirugía robótica. De hecho, y esto es un factor que hay que recalcar, si el cirujano hace las mismas técnicas que una cirugía laparoscópica o una cirugía abierta por ejemplo, los resultados van a ser los mismos. Ahora si el cirujano con experiencia y con paciencia trabaja por mejorar la técnica, el robot permite mejorar de una forma continuada. La robótica permite llevar a cabo técnicas mejores con mucha más precisión, y esta es la clave, la precisión que podemos llegar a alcanzar», ha explicado el director del grupo urológico Suturo en los hospitales Vithas Vigo y Vithas Sevilla, Manuel Ruibal Moldes.
Por su parte, desde la Unidad de Cirugía Robótica de Vithas Sevilla, el urólogo del grupo Suturo, Antonio Medina González, ha destacado cómo el robot Da Vinci es actualmente la «máxima tecnología existente» para la realización de cirugías mínimamente invasivas, aportando innumerables beneficios para el paciente, si bien ha avisado de que «de nada serviría tener la máxima tecnología si el urólogo que opera no tiene una amplia experiencia» para obtener los mejores resultados.
En este sentido, el doctor ha subrayado la necesidad de un diagnóstico precoz. «No todos los tumores de próstata son iguales, por eso lo más importante es realizar un diagnóstico adecuado de forma temprana del cáncer de próstata para poder ofrecerles a nuestros pacientes la curación. Afortunadamente, hoy en día si lo diagnosticamos a tiempo, prácticamente todos los pacientes se curan si se realiza un tratamiento de forma adecuada», ha recalcado.
Por su parte, el urólogo y responsable de la Unidad de cirugía robótica del Hospital Universitario Vithas Madrid Arturo Soria y Vithas Internacional, Pedro Sánchez de La Muela, ha explicado que actualmente la prostatectomía radical robótica con preservación del espacio de Retzius es la técnica quirúrgica que con mayor frecuencia están realizando, dados sus excelentes resultados en cuanto a conservación de la continencia urinaria y la mejor y más rápida recuperación de la erección en relación con las técnicas convencionales.
«Así, la cirugía robótica supone una auténtica revolución tecnológica de expectativas ilimitadas; nos abre posibilidades terapéuticas antes impensables, permitiéndonos realizar mejores tratamientos para el cáncer de próstata y otros tumores del aparato urinario», ha argumentado el especialista.
En cuanto a la técnica en sí, a diferencia de otras formas de tratar el cáncer de próstata, la cirugía robótica a través del robot Da Vinci suma numerosas ventajas respecto a la cirugía abierta y la laparoscopia tradicional. En palabras del jefe del servicio de urología del Hospital Vithas Xanit Internacional, Juan Arocena, la cirugía robótica ofrece «más seguridad, minimizando los riesgos de las cirugías abiertas convencionales y los posibles errores humanos» gracias a los sistemas de seguridad implantados en el proceso.
A estos riesgos se añaden más ventajas de cara al paciente como la propia reducción del dolor posoperatorio y el menor tiempo de estancia hospitalaria, ofreciendo una mejor recuperación, más rápida y con menor tasa de complicaciones posoperatorias.
Actualmente, junto a las intervenciones urológicas, la cirugía robótica a través del robot Da Vinci también se lleva a cabo en otras especialidades que requieren de una alta precisión por su dificultad intrínseca. Este es el caso de la cirugía torácica, la cirugía general y algunas patologías determinadas de la ginecología y otorrinolaringología.