La Policía intervino el dispositivo para boicotear la Vuelta en una operación criticada por ERC y Junts
Estaba escondido en el acceso a un túnel y lo formaban dos bidones de 200 litros cada uno, así como un mecanismo de activación
La Policía Nacional intervino el sábado el dispositivo compuesto por dos bidones y tubos ideado por los cuatro detenidos en Lleida que presuntamente pretendían boicotear la Vuelta Ciclista a España lanzando a la carretera aceite, en una operación que fue censurada por ERC y Junts, que pidieron la libertad para los arrestados entre críticas a la actuación policial.
En un comunicado, la Policía Nacional ha dado este martes detalles de la Operación Splendor , mostrando las imágenes en la que se aprecia a un agente cuando detecta el sistema de almacenaje de 400 litros de un líquido «similar al aceite de motor» que pretendían activar para boicotear el paso del pelotón ciclista durante la etapa del lunes, 28 de agosto, entre las localidades de Suria (Barcelona) y Arinsal (Andorra).
Los detenidos fueron puestos este lunes a disposición de la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Solsona (Lleida), quedando en libertad provisional. Las actuaciones han sido declaradas secretas y a los arrestados se les imputan los delitos de pertenencia a grupo criminal, desórdenes públicos, contra la seguridad vial y contra el medio ambiente.
SIN ANTECEDENTES Y SUPERAN LOS 50 AÑOS DE EDAD
Fuentes de la investigación consultadas por Europa Press han señalado que los detenidos no tienen antecedentes policiales y superan todos los 50 años de edad, habiendo nacido el más joven de ellos en el año 1969. Los investigadores analizan ahora su vinculación a grupos independentistas, concretamente su posible relación con los CDR.
En concreto, los agentes los sorprendieron el sábado en una zona boscosa de la comarca ilerdense del Solsonés en el momento en el que se disponían a activar un ingenio con el que se derramarían cientos de litros de líquido. El dispositivo estaba colocado en una zona alta, en un acceso a un túnel.
Las citadas fuentes de la investigación han subrayado la peligrosidad de la acción que querían acometer, sobre todo al paso de los ciclistas que compiten en la Vuelta a España en esta edición de 2023. Para el acceso, la Policía tuvo que activar a sus especialistas del GOES y a los Tedax.
DOS BIDONES Y UN DISPOSITIVO DE ACTIVACIÓN
El artificio estaba formado por dos bidones, de una capacidad de 200 litros cada uno, así como un dispositivo de activación con una electroválvula y un temporizador. El mecanismo estaba escondido entre la vegetación, incluida la manguera que iba a verter el líquido y que se extendía hasta la citada carretera, dificultando su detección.
El líquido localizado, similar al aceite de motor, está pendiente de análisis por parte de especialistas de Policía Científica para determinar su composición final.
Los agentes han constatado que los arrestados adoptaban numerosas medidas de seguridad para evitar su detección y vigilancia. En el momento de su detención ninguno portaba teléfono móvil y habían utilizado senderos secundarios «de compleja transitabilidad» para llegar hasta el punto donde habían instalado el mecanismo, según la Policía.
La investigación ha sido desarrollada por agentes de la Comisaría General de Información y la Brigada Provincial de Información de Barcelona, bajo la dirección del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Solsona (Lleida). En el operativo final han participado, además, especialistas de la Comisaría General de Policía Científica y de la Jefatura Superior de Policía de Cataluña.
El presidente y la secretaria general de ERC, Oriol Junqueras y Marta Rovira, pidieron la libertad para los cuatro detenidos en la comarca del Solsonès (Lleida), criticando a la Policía de actuar «contra las libertades fundamentales y los derechos humanos».
La actuación policial también motivó la reacción inmediata de la presidenta y el secretario general de Junts, Laura Borràs y Jordi Turull, que pidieron en redes sociales la libertad para los arrestados en lo que calificaron como «detenciones preventivas propias de regímenes autoritarios y caducos».
