El Gobierno regional da «pautas» a los ayuntamientos ante incendios forestales, que han quemado ya 5.500 Ha este año
Facilita unas guías a Rionansa, Vega de Liébana y Arredondo sobre cómo deben actuar y gestionar la fase de preemergencia por riesgo de incendio
El Gobierno de Cantabria ha presentado este martes unas guías informativas dirigidas a los ayuntamientos de Arredondo, Rionansa y Vega de Liébana en las que se les aportan «pautas» de actuación en una fase de preemergencia por incendios forestales, que en lo que va de año ya han quemado en la comunidad autónoma casi 5.500 hectáreas cuando aún no ha llegado el otoño, la época de mayor riesgo en la región.
Las guías han sido elaboradas por la Dirección General de Interior del Gobierno de Cantabria en colaboración con la de Biodiversidad, pertenecientes a las consejerías que lideran los regionalistas Paula Fernández y Guillermo Blanco, respectivamente.
El objetivo de estas guías es que los ayuntamientos, que son los encargados de gestionar la fase de preemergencia por incendio forestal (en la fase posterior de emergencia esta competencia pasa a la Dirección General de Interior), tengan una planificación, sepan con qué medios y cómo deben actuar de cara a la población ante el riesgo de incendio forestal.
Así, por ejemplo, las guías les informan sobre todo lo relativo a cómo deben avisar a la población o cómo acometer posibles evacuaciones ante un incendio forestal.
Con estas guías, presentadas este martes en un acto celebrado en la sede del Ejecutivo regional, el Gobierno persigue una «mejor» coordinación con los ayuntamientos y que estos sepan cómo actuar de una forma «más eficaz».
En declaraciones a los medios de comunicación previas al acto, el consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, y la de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior, Paula Fernández, han recordado que en Cantabria la época del año de mayor riesgo de incendios forestales es el otoño, cuando suele aparecer el viento sur que, unido a la sequedad de los terrenos, favorece la propagación de estos fuegos.
Pese a no ser ahora la época de mayor riesgo, Blanco ha explicado que, por ejemplo, hoy la zona sur de Cantabria –Campoo y Valderredible– está en nivel de alerta 2 por riesgo de incendios forestales.
MÁS MEDIOS QUE NUNCA PARA LUCHAR CONTRA LOS INCENDIOS FORESTALES
El consejero ha aprovechado su intervención para agradecer el trabajo que realiza el operativo de prevención y lucha contra los incendios forestales, integrado por unas 400 personas entre agentes del medio natural, bomberos forestales, técnicos de guardia y emisoristas, una cifra de efectivos nunca antes alcanzada y que está un 36 por ciento por encima de la que había hace tres años.
El consejero ha señalado que, aunque «nunca es suficiente», Cantabria cuenta con unos medios «como ninguna comunidad» para combatir los incendios forestales y está «mejor dotada que nunca» tanto en personal, como en infraestructuras o dotación material.
Además, Blanco ha reclamado también la colaboración y ayuda de los cántabros para «ayudar a acorralar» a aquellos que aún «no han entendido el mensaje» y queman los montes.
El consejero ha recordado que Cantabria dispone desde hace un año con una orden que regula las quemas controladas y prescritas, lo que, a su juicio, «deja sin excusas» a aquellos que deciden hacerlo sin autorización y por cuenta propia.
Según datos aportados por el consejero, en Cantabria suelen producirse de media cada año unos 800 incendios forestales que queman unas 9.000 hectáreas –una cifra que en 2016 se elevó a las 17.000, cifra récord–.
Sin embargo, ha explicado que en los últimos años se está reduciendo la cifra media y espera que este año se baje de las 8.000 hectáreas quemadas.