El Gobierno deja en manos del alcalde de Ermua que Mari Mar Blanco participe en el homenaje a su hermano

El alcalde rectifica y permitirá que intervenga en el acto, 25 años después del secuestro y asesinato del concejal a manos de ETA

MADRID, 5

El Gobierno ha dejado en manos del alcalde de Ermua que la hermana de Miguel Ángel Blanco, Mari Mar Blanco, pueda participar en el homenaje al exconcejal del PP asesinado por ETA hace 25 años, que se celebra el próximo domingo en la localidad vizcaína y en el que van a participar el Rey Felipe VI y el presidente, Pedro Sánchez.

Este martes Presidencia del Gobierno se puso en contacto con Mari Mar Blanco para transmitirle su disposición a que participase en el homenaje a su hermano, según fuentes de Moncloa consultadas por Europa Press. Al mismo tiempo le trasladaron que corresponde al alcalde de Ermua, Juan Carlos Abascal (PSE), invitarla a intervenir, dado que es la corporación municipal la que organiza el acto.

La llamada de Moncloa se produjo, tal como precisan las mismas fuentes, después de que conociesen a través de los medios de comunicación la carta de la también presidenta de la Fundación Miguel Ángel Blanco, que pedía al alcalde de Ermua tener voz en el acto de recuerdo a su hermano.

«Te comunico que he decidido remitir copia de esta carta a la Presidencia del Gobierno de España y del Gobierno vasco, a efectos de que puedan apoyar expresamente esta sencilla solicitud. Solo quiero hablar en el homenaje a mi hermano y en su memoria», asegura Mari Mar Blanco en la misiva, a la que ha tenido acceso Europa Press.

A este respecto, Juan Carlos Abascal ha decidido incluir finalmente a la hermana de Blanco en el acto institucional del domingo –en el que se conmemoran los 25 años del secuestro y asesinato del concejal–, según ha adelantado el diario ABC y está trabajando con Casa Real y con Presidencia del Gobierno para modificar el programa inicial e incluir su intervención.

EN SU CARTA VE «JUSTIFICADO Y NECESARIO» PODER INTERVENIR

En su carta, Mari Mar Blanco se dirige formalmente al regidor de Ermua para solicitarle poder tomar la palabra en el acto del domingo y le recuerda que estos años «jamás había tenido que perseguir altavoces de ningún tipo» porque el partido en el que su hermano militó y la propia sociedad española se los han ofrecido «con generosa frecuencia».

Sin embargo, en una efeméride tan señalada como la de este año, cree «justificado y necesario» poder dirigirse al auditorio en representación de su familia y de la Fundación Miguel Ángel Blanco. Por eso, asegura que las explicaciones que le había ofrecido el alcalde acerca de que este año «se pretende homenajear a todas las víctimas de ETA» no le resultan «convincentes».

Mari Mar Blanco dice al alcalde que le resulta «imposible explicar» por qué no va a poder «pronunciar un breve discurso el día que se cumplen 25 años» de la muerte de su hermano, en el mismo pueblo donde le asesinaron, «en el Pabellón con el que él soñó en su corta etapa como concejal y que además ahora lleva su hombre».

«Por ello, te pido que, como organizador del acto, reconsideres esa decisión», afirma, para añadir que ha enviado copia de esta carta a la Presidencia del Gobierno de España y del Gobierno vasco. «Con la esperanza de que la atiendas, recibe un cordial saludo», concluye Mari Mar Blanco en la citada carta, que ha recogido Europa Press.

El secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco, en julio de 1997 conmocionó a la sociedad española e impulsó el movimiento cívico Espíritu de Ermua , con las manos blancas alzadas como sentimiento de rechazo multitudinario al terrorismo.

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