El Gobierno defiende la actuación policial en el mitin de Vox en Vallecas con 13 detenidos y 170 identificados
El Gobierno ha vuelto a defender la actuación policial en torno al mitin de Vox en Vallecas previo a la campaña electoral de la Comunidad de Madrid que dejó, según su balance, 13 detenidos en tres días diferentes y 170 identificados con la Ley Orgánica 4/2015, la conocida como ley mordaza . «No se han observado actitudes incorrectas, hasta el momento, en la actuación policial», apunta.
En una respuesta parlamentaria por escrito con fecha de 11 de mayo, consultada por Europa Press, el Ejecutivo no da detalles sobre la identidad de los detenidos –el Ministerio del Interior aseguró que debía ser el juez el que decidiera sobre esta cuestión– tras saberse dos días antes del 4-M que entre los arrestados había personas vinculadas a la seguridad de Unidas Podemos.
El acto con la participación del líder de Vox y la candidata a las elecciones madrileñas, Santiago Abascal y Rocío Monasterio, respectivamente, derivó en cuatro detenciones el mismo día de los altercados, el 7 de abril, por los delitos de atentado a agente de la autoridad, desórdenes públicos, lesiones y daños. Entre ellos había tres menores.
El día 12 de abril se detuvo a otra persona adulta por delitos de atentado a agente de la autoridad y lesiones y el día 15 de abril fueron detenidas otras ocho personas mayores de edad, por delitos de atentado a agente de la autoridad, lesiones (a dos de ellos) y desórdenes públicos. El Gobierno asegurado que fueron identificados además 170 personas de acuerdo a la ley mordaza .
Desde el primer momento, Abascal criticó el dispositivo policial al entender que fue insuficiente y que se alentó a que grupos de la ultraizquierda boicotearan el acto. El Ministerio del Interior respondió defendiendo la actuación policial y afeando al líder de Vox que abandonara el atril para caminar hacia la línea policial que contenía al grupo de manifestantes contrario a la presencia de la formación en Vallecas.
Las críticas de Vox aumentaron cuando, en los últimos días de la campaña madrileña, se supo por la prensa que entre los detenidos había personas vinculadas a la seguridad de Unidas Podemos, al margen de la escolta oficial que da protección al exvicepresidente del Gobierno y candidato en los comicios madrileños, Pablo Iglesias, que por entonces criticaba la amenaza para la democracia que representaba el envío de cartas con balas a él y otros cargos públicos.
GRUPO DE SIGNO POLÍTICO ANTAGÓNICO
En el relato cronológico del Gobierno, que responde al diputado de EH Bildu Jon Iñarritu, se recuerda que el de Vox era un acto comunicado a la Delegación del Gobierno y que, «una vez iniciada la concentración, se presentaron en la plaza personas de signo político antagónico a los concentrados, siendo ubicados a distancia, al objeto de preservar el normal desarrollo del acto con una línea de separación entre ambos grupos de personas».
El Ejecutivo refiere que se produjeron «gritos y consignas» cuando empezaron las alocuciones de los políticos de Vox. Y añade a continuación: «Un miembro del partido convocante se acercó hasta el cordón policial, sin romperlo, para recriminar la actitud del grupo contrario, produciéndose en esos momentos una reacción de las personas situadas fuera del cordón policial contra los propios policías, consistentes en insultos y agresiones».
En este contexto, añade que la Policía «se vio en la obligación de dispersar a estas personas», utilizando los medios de defensa reglamentarios «de forma proporcionada y selectiva sobre los más violentos». Además, recuerda que se inició una investigación por las agresiones sufridas por antidisturbios de la Unidad de Intervención Policial (UIP).
De forma genérica, el Ejecutivo señala que la Policía respondió a la «actitud violenta de una persona a la que trata de detener utilizando la fuerza siempre de forma proporcional y progresiva, en relación con laviolencia o resistencia empleada por aquella».
Finalmente, el Gobierno dice desconocer en esta respuesta por escrito de 11 de mayo si se interpusieron denuncias por parte de periodistas que cubrieron el acto de Vox en la llamada plaza roja de Vallecas, aunque subrayando que la Policía Nacional «da a todas las denuncias el tratamiento legalmente establecido».
Lo mismo dice sobre unos incidentes supuestamente ocurridos en la Comisaría de Moratalaz, recordando que las grabaciones de las cámaras se encuentran a disposición del órgano judicial en el caso de ser requeridas.