El Gobierno de Colombia abre una investigación para comprobar si Viva Air incumple la normativa laboral
El Gobierno de Colombia, a través del Ministerio de Trabajo y Previsión Social, ha abierto un proceso de investigación preliminar para comprobar si la aerolínea low cost Viva Air incumple la normativa laboral.
El motivo de esta decisión es el comunicado interno que ha emitido la compañía en los últimos días, en el que se informaba a sus empleados que no recibirían la nómina correspondiente al mes de mayo.
«Hemos buscado por diferentes medios la consecución de recursos económicos que nos ayuden a solventar los pagos de la nómina. Lastimosamente, con el desafortunado desenlace de la compañía, no fue posible conseguir dichos recursos para cubrir este pago, por lo tanto, dolorosamente, debemos comunicar que en mayo no se realizará el pago de la nómina», han explicado.
Con arreglo al artículo 140 del Código Sustantivo del Trabajo de Colombia, durante la vigencia del contrato, el trabajador tiene derecho a percibir el salario aun cuando no haya prestación del servicio por culpa del empleador.
Ante esta normativa, el viceministro de Relaciones Laborales e Inspección de Colombia, Edwin Palma, ha acusado a Viva Air por no haber solicitado ni permiso para suspender actividades, ni para despedir colectivamente. «Ahora cesa en los pagos aún cuando hay contratos laborales vigentes y personas susceptibles de especial protección constitucional», ha denunciado.
Los trabajadores de la aerolínea están a la espera de futuros pasos de la junta directiva. Mientras, esta misma semana, Avianca ha anunciado la apertura de una convocatoria de contratación para reclutar a 730 profesionales aéreos en Colombia y en El Salvador, en un proceso en el que dará prioridad a los candidatos de Viva Air y Ultra Air.
A su vez, la Superintendencia de Sociedades (el órgano administrativo encargado de supervisar las buenas prácticas de las empresas en Colombia) ha admitido la entrada de la aerolínea low cost Viva Air en proceso de reorganización empresarial. Este es el último recurso que tiene la compañía para salvar su negocio o, por el contrario, entrar definitivamente a liquidación.