El Gobierno de Cantabria inicia de emergencia la reparación del Puente Viejo de Oruña, afectado por el último temporal
Es una infraestructura del siglo XVI que fue declarada Bien de Interés Cultural en 1984 y que será peatonal tras una segunda intervención
El Gobierno de Cantabria ha comenzado los trabajos para reparar, vía mecanismo de emergencia, el Puente Viejo de Oruña (Piélagos) sobre el río Pas, que data del siglo XVI y que resultó afectado por el último temporal. A los trabajos se destinarán cerca de 300.000 euros.
El consejero de Obras Públicas, José Luis Gochicoa (PRC), ha asistido este jueves al inicio de las obras que, en un primer momento, están orientadas a «evitar el riesgo de caída» debido a las grietas existentes, de ahí la importancia de actuar «cuanto antes», según ha explicado.
Posteriormente, la intención desde hace tiempo es su semipeatonalización, una fórmula que, a juicio del consejero, «tiene más sentido que para el tráfico rodado dada sus características» a fin de embellecer el entorno una vez finalice la estabilización de la estructura. La actuación global podría estar finalizada antes del verano.
En su visita, entre otras autoridades, Gochicoa ha estado acompañado por la alcaldesa de Piélagos, Verónica Samperio (PSOE), que ha mostrado su agradecimiento a la Consejería de Obras Públicas por un proyecto que ya estaba contemplado y que debido a trámites administrativos se ha demorado, teniendo que realizarse una intervención previa de emergencia. «Es el proyecto de peatonalización el que todos quieren ver finalizado», ha incidido.
LOS TRABAJOS
El Puente Viejo de Oruña es una infraestructura compuesta por piedra de sillería de cinco ojos, mandada construir en 1585, reinando Felipe II, y declarada Bien de Interés Cultural (BIC) el 20 de diciembre de 1984.
Como consecuencia de los temporales de lluvias a lo largo de octubre y noviembre, el último durante los pasados días 27, 28 y 29, se ha producido la pérdida de sillares de piedra del tajamar del pilar 1, ocasionando la práctica desaparición del tajamar.
Así mismo, la pila 2, situada a la izquierda de la 1, en el sentido de las aguas del río Pas, también se ha visto afectada por la pérdida del material que le rodeaba.
Ante dicha situación el Gobierno de Cantabria decidió declarar de emergencia los trabajos necesarios para la restitución del puente y su entorno mediante la consolidación de la pila 1 mediante la ejecución de una pantalla interna de micropilotes de 20 metros de longitud y 180 milímetros de sección.
Asimismo, se procederá a la consolidación de la cimentación de la pila 1; la construcción de la cimentación del tajamar de la pila 1 y la reconstrucción del tajamar de la pila 1, aprovechando el material original que se mantiene al pie de la misma.
Finalmente, se procederá a la reposición del material arrastrado de la pila 2, mediante la aportación de material pétreo procedente de cantea, de tamaño 200-500 milímetros, reposición y modelado del suelo perdido, extendido de una cubierta de tierra, ha informado en un comunicado el Ejecutivo regional.