El Gobierno de Bolivia retira al personal médico de Cochabamba, bastión de Evo Morales, por el coronavirus

Directores de hospitales denuncian la falta de formación, material y equipo especializado en cuidados intensivos

El comandante de la guarnición militar de Cochabamba, Alfredo Cuéllar, ha anunciado la retirada del personal médico y sanitario de la región del Trópico de Cochabamba ante la presencia de «radicales» que se niegan a cumplir con la cuarentena. Cochabamba es una de las regiones en las que el expresidente Evo Morales cuenta con un mayor apoyo.

Cuéllar «se reunió con Andrónico Rodríguez y Gerardo Loza y no hubo ninguna respuesta. «Por la actitud que tiene la población me remitieron la cantidad de médicos internistas que se han salido de los hospitales de allá, huyendo», ha explicado Cuéllar en declaraciones recogidas por la agencia de noticias oficial boliviana, ABI.

El oficial ha subrayado que la salida del personal médico se debe a la actitud de la gente que no parece temer al contagio del coronavirus. Ante esa situación, por seguridad el personal médico, se replegó. «Ellos mismos se lo han buscado con sus actitudes, porque, en caso que alguno se contagie, no va a haber quién los atienda», ha advertido el general Cuéllar.

En concreto ha señalado que la orden de restringir la circulación vehicular en todo el territorio del Estado no ha sido acatada desde el municipio de Colomi (camino al Trópico) hasta Bulo Bulo, frontera departamental con Santa Cruz.

«Para esta gente todo transcurría normal, pero el personal médico sabe y conoce la gravedad (de la pandemia). Entonces, por temor, internistas y enfermeras se han ido», ha explicado Cuéllar.

Por su parte, la gobernadora del departamento, Esther Soria, ha señalado a los dirigentes del Trópico por cualquier situación que acontezca por esa desobediencia a las normas de prevención del coronavirus.

«No podemos desatender la normativa en ese sentido, así que los dirigentes serán responsables (…). De ahí también escapó una persona enferma, parece que no quieren tomar en cuenta la gravedad de esta enfermedad», ha indicado Soria.

SIN MEDIOS HUMANOS NI MATERIALES

Este mismo viernes, ocho directores de hospitales han comparecido conjuntamente para denunciar que están «indefensos» ante el contagio del nuevo coronavirus debido a la falta de formación y de recursos materiales para afrontar la pandemia. Además tampoco existe un protocolo claro sobre cómo proceder.

«Bolivia se encuentra enfrentando una pandemia considerada como la más cruel de los últimos 70 años: el coronavirus (…). Bolivia ya es parte de esta durísima realidad. Por eso debemos ser sinceros y reconocer (…) que no estamos preparados para enfrentar esta enfermedad», ha subrayado el director del Hospital del Tórax, Edgar Pozo, según recoge el diario Página Siete .

Los profesionales de salud del sector público están enfadados, dolidos y preocupados ante esta crisis, según los directores. «Enojados porque nos mandan a la guerra sin armas, nos condenan a luchar en condiciones desfavorables. No contamos con los insumos mínimos, como gorras, barbijos (mascarillas), botas, lentes, batas, etcétera. Menos aún con insumos de alta gama, como los medicamentos de terapia intensiva y unidades de terapia intensiva que al final con seguridad serán necesarias», ha indicado.

En la ciudad de La Paz, con casi dos millones de habitantes, deberíamos tener 200 camas de terapia intensiva y sólo hay 35. De ese número, seis están en el Complejo de Miraflores, pero tres no funcionan, ha destacado el presidente de la Sociedad Boliviana de Terapia Intensiva, Adrián Ávila.

Todos los directores se han lamentado por las instrucciones del Gobierno, que advierten que si el personal no cumple con las normas, habrá despidos y sanciones penales. «El tema es que no tenemos las armas», ha remachado Pozo.

El último informe oficial refleja 19 casos confirmados del nuevo coronavirus en Bolivia, tras la confirmación de tres casos en las últimas 24 horas en el departamento de Santa Cruz. El país ha cerrado sus fronteras para evitar contagios.