El Gobierno celebra una jornada para fomentar los planes de igualdad en empresas ante los pocos registrados

En Cantabria deberían tener en marcha el plan 113 empresas y solo se han registrado 62, algunos de ellos de entidades que todavía no están obligadas

El Gobierno de Cantabria ofrecerá este miércoles, 26 de mayo, una jornada sobre Planes de Igualdad en las Empresas para fomentar la elaboración de estos documentos ante su preocupación por el «bajo número» de los registrados hasta la fecha.

Estos planes de igualdad son obligatorios por ley para algunas empresas, y a pesar de ello, en Cantabria, en torno a la mitad de ellas no los han elaborado. En concreto, desde el 7 de marzo de 2020 deben tenerlos aprobados las empresas que tengan entre 151 y 250 trabajadores, desde el 7 de marzo de 2021 las que tengan entre 101 y 150 y a partir de 2022 será obligatorio para las que tengan entre 50 y 100.

Así, la jornada de este miércoles, organizada junto a CEOE-Cepyme y los sindicatos UGT y CCOO, pretende dar un «impulso» para que las entidades empiecen a trabajar en estos planes de igualdad, que deben estar consensuados entre la empresa y la representación de los trabajadores.

El evento tendrá formato presencial -con medidas Covid y aforo limitado- y también se podrá seguir por videoconferencia. Está abierto al público y ya cuenta con un centenar de inscritos, pertenecientes al ámbito sindical, responsables de recursos humanos o gestorías y asesorías.

Habrá una primera ponencia de técnicos de la Dirección General de Trabajo que se encargan de esta materia; responsables de Igualdad de CCOO y UGT, que abordarán en registro y planificación del documento; y técnicos de CEOE-Cepyme que trabajan en las auditorías retributivas.

Así, en este primer evento se tratarán procesos del plan como la negociación y registro o la parte retributiva, aunque el Gobierno de Cantabria tiene previsto organizar más actividades a lo largo del año en este sentido.

Por ejemplo, en el mes de julio impartirá junto a la Universidad de Cantabria un curso de verano denominado Igualdad, género y trabajo , que tiene una perspectiva «mucho más amplia» y está vinculado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pero también tratará el registro de los planes de igualdad.

La jornada de este miércoles ha sido presentada hoy en rueda de prensa por la consejera de Empleo y Políticas Sociales, Ana Belén Álvarez, y el director general de Trabajo, Gustavo García, quienes han destacado el «preocupante bajo número» de planes presentados hasta el momento.

113 EMPRESAS CÁNTABRAS OBLIGADAS

En Cantabria ya deberían tener aprobado su plan 113 empresas, 34 pertenecientes al grupo de más de 250 trabajadores, 38 con entre 151 y 250, y 41 con entre 101 y 150. Sin embargo, solo se han registrado en la Dirección General de Trabajo 62 planes, y algunos son de entidades que aún no están obligadas y los han elaborado de forma voluntaria.

Aunque la ausencia de estos planes está tipificada como infracción, aún no se han impuesto sanciones dado que el 2020 ha sido un año «complicado», y por ahora la Inspección de Trabajo se está centrando en impulsarlos y «reconducirlos» para que se ajusten a la legalidad, ya que «no es una tarea sencilla» y para que sean correctos requieren «cierto sosiego», ya que tienen que estar «siempre negociados y participados».

La consejera de Empleo ha destacado la necesidad de trabajar para seguir impulsando la igualdad, ya que «se ha avanzado» y «es evidente que las desigualdades han disminuido», pero en algunos ámbitos «la falta de igualdad sigue siendo evidente».

En este sentido, ha destacado que en Cantabria hay una diferencia de 6.238 euros en el salario medio de ambos sexos, con 25.250 anuales los hombres frente a los 19.012 de las mujeres. Asimismo, la afiliación de las mujeres a la Seguridad Social está 6 puntos por debajo de la de los hombres, un dato «ligeramente mejor» que la media española, que es de 6,75.

Además, por sectores, las mujeres siguen siendo «minoritarias» en la industria y construcción y «acaparan» actividades sanitarias, de servicios sociales o de educación. Tambien están «infrarrepresentadas» en puestos directivos y «condicionadas» por la maternidad, que es una «gran desventaja para su carrera», ha señalado Álvarez, incidiendo en que, «a pesar del camino andado, todavía estamos lejos de alcanzar la igualdad real en el ámbito laboral».