El Gobierno actualiza la regulación de las servidumbres aeronáuticas para reducir las superficies en un 50%
El Consejo de Ministros, en su reunión de hoy y a propuesta del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y el Ministerio de Defensa, ha aprobado un Real Decreto por el que se actualiza la regulación de las servidumbres aeronáuticas para reducir la superficie afectada en un 50% para, entre otras cosas, concentrar los esfuerzos de vigilancia y control en las zonas más sensibles.
Las servidumbres aeronáuticas establecen, principalmente, limitaciones a la altura de las construcciones en las proximidades de los aeropuertos y de las instalaciones radioeléctricas aeronáuticas. Su objetivo es garantizar la seguridad y regularidad de las operaciones aéreas.
Así, con la nueva regulación aprobada este martes se reducen las superficies afectadas por servidumbres aeronáuticas aproximadamente en un 50%. Ya no estarán afectadas las zonas más alejadas de los aeropuertos y radioayudas, en las que no hay riesgo para la seguridad aérea.
Además, se alinea el diseño de las servidumbres con la normativa internacional y con la comunitaria, sobre la certificación de aeropuertos, y se concentran los esfuerzos de vigilancia y control en las zonas más sensibles, alrededor de los aeropuertos y de las instalaciones radioeléctricas aeronáuticas.
A esto se une la reducción de la carga administrativa para las tres administraciones, central, autonómica y local, puesto que se desarrolla el régimen de exenciones ya aprobado por el Gobierno el pasado verano.
De esta forma, el Real Decreto permitirá una supervisión de la seguridad aérea más eficiente, focalizando las servidumbres allá donde son más necesarias y, a la vez, minimizar su impacto en el territorio al reducir su extensión, según el comunicado del Mitma.
Asimismo, se pretende potenciar el principio de autonomía de las administraciones territoriales con competencias en materia de ordenación del territorio y urbanismo, simplificando el régimen de control aeronáutico sobre los procesos urbanísticos en fases de planificación y ejecución.
Todo ello, gracias al posible establecimiento de exenciones a la obtención de los informes y acuerdos previos aeronáuticos, lo que, en definitiva, contribuirá a la reactivación e impuso de la economía.