El factor más determinante al buscar una vivienda es el precio, seguido de la ubicación, según pisos.com
El factor más determinante para los españoles al buscar una vivienda es el precio, en un 48% de los casos, seguido de la ubicación (37%), independientemente de la edad de los compradores, según se desprende del informe Cuatro generaciones, una vivienda , realizado por el portal inmobiliario pisos.com.
Este informe comparativo, que ha analizado la brecha intergeneracional en el mercado de la vivienda, arroja varias conclusiones tras comparar el comportamiento, las necesidades y las exigencias de cuatro generaciones distintas, la generación Z (entre los 18 y 27 años) los millennials (entre los 28 y los 43 años), la generación X (de 44 a 59 años) y los boomers (de 60 a 78 años).
Concretamente, la tendencia de dar prioridad máxima al precio en la búsqueda de una vivienda se repite en todas las generaciones, excepto en la generación X , que coloca un poco más arriba la localización frente al precio.
Además, el informe destaca que cuanto más jóvenes son los ciudadanos, más importancia le dan al precio del inmueble, siendo la gran prioridad para la generación Z (60%) y perdiendo peso entre los boomers (38%).
SE ATRASA CADA VEZ MÁS LA EDAD DE COMPRA DE LA PRIMERA VIVIENDA
De esta manera, este estudio, que ha contado con la colaboración de Juan A.Módenes, profesor titular del departamento de Geografía de la Universidad Autónoma de Barcelona, indica que para los más jóvenes comprar una casa «ha pasado de ser un sueño a una utopía», atrasando cada vez más la edad a la que los españoles compran la primera vivienda.
En este sentido, el director de estudios de pisos.com, Ferran Font, ha señalado que los más jóvenes encuentran mayores dificultades a la hora de adquirir una vivienda, debido, principalmente, al «deterioro del poder adquisitivo por la brecha entre salarios y precios de vivienda», algo que cada vez se acrecienta más.
Por otra parte, el documento ha analizado cómo viven las distintas generaciones, reflejando que los más jóvenes no solo se emancipan más tarde, sino que, en muchos casos, al no contar con suficiente poder adquisitivo, se ven obligados a alquilar, y pocos pueden hacerlo en solitario.
EL 35% DE LA GENERACIÓN Z VIVE DE ALQUILER
De esta manera, el 35% de la generación Z , la más joven, vive de alquiler, y el 26% lo hace en pisos compartidos. En el lado apuesto, solo el 12% de los más mayores vive de alquiler, y hasta el 9% lo hace sin necesidad de compartir.
Asimismo, el 15% de la generación X y hasta uno de cada tres millennials apuesta por el arrendamiento. «Solo los boomers que viven de alquiler reconocen hacerlo por obtener una mayor flexibilidad (19%), pues tanto los de generación X (23%), centennials (29%) y millennials (31%) lo achacan a la falta de ingresos o a un salario bajo», detallan desde el portal inmobiliario.
En este contexto, el estudio resalta que «solo el 7% de la generación Z está pagando una hipoteca», caso opuesto al de los boomers (23%), millennials (37%) y generación X (42%).
Las diferencias de poder adquisitivo y flexibilidad se ven también reflejadas en el tipo de hipoteca contratada, siendo la variable más popular entre boomers (71%) y generación X (60%) y la fija entre los jóvenes, con un 59% y 53% en el caso de centennials y millennials , respectivamente. El tipo mixto encuentra su máximo entre los Z (24%).
Por su parte, el demógrafo Módenes ha destacado la falta de oferta de vivienda como uno de los principales problemas, aunque también ha recordado la importancia de gestionar adecuadamente el parque inmobiliario actual.
«La oferta ya no es alimentada por unas cifras de construcción que en el pasado eran altas, y, además, las viviendas de segunda mano, crecientes por el envejecimiento de la población, no siempre acaban en manos de nuevos hogares. Piénsese en los procesos de transformación de vivienda del centro de nuestras ciudades a vivienda de uso turístico. Y todo ello adobado con unos niveles de inseguridad residencial muy intensos, bastante por encima de la media europea», ha concluido Juan A. Módenes.