El escritor Íñigo Usabiaga reflexiona sobre la identidad personal en el 'El pensador'
/COMUNICAE/
El debut literario del autor invita a los lectores a hallarse a sí mismos mediante una sensible lírica recorriendo los pensamientos más personales y los aprendizajes que le han hecho crecer como persona
El autor novel Íñigo Usabiaga Gervas irrumpe con fuerza en el panorama literario con su primera obra El pensador (Editorial Universo de Letras).
El escritor recopila de esta manera reflexiones, frases que invitan a meditar, pequeñas historias con moralejas y algunos de sus poemas más íntimos tras un largo recorrido personal y que ahora se ha aventurado a compartir en este breve ensayo tan particular y original.
«Me gusta hablar a la gente de ideas, de formas de pensar, sobre todo, cuando estas son positivas y eficaces. Creo que soy un «chapas» por naturaleza, qué le voy a hacer. En mi juventud, me retraje en mí mismo y dejé de compartir estas ideas. Ya alcanzando la treintena, pensé que podría volver a mis orígenes, en forma de trabajo o proyecto de vida, como puede ser este libro».
El prometedor literato guía a los lectores por un camino con la búsqueda personal como meta. Para ello, plasma sobre el papel algunos consejos, claves y aprendizajes que ha ido obteniendo gracias a la experiencia para alcanzar ese tan anhelado objetivo, como la importancia de cometer errores para aprender de ellos; de dejarse llevar por la intuición, o se de pacientes, constantes y responsables, y tener siempre presente valores como el esfuerzo o el sacrificio, y la relación intrínseca que existe entre el ser humano y la naturaleza para poder crecer, disfrutar y exprimir la vida todo lo posible.
Así, temas como el universo, la filosofía, la muerte, la verdad o el trayecto que se ha de seguir son algunos de los escogidos por el autor para llevar a cabo su tarea.
«La vida se ha convertido en un lienzo en blanco, en el cual todas las opciones son posibles. Esto es bueno y malo. Bueno porque es una oportunidad para redefinir nuestros sistemas de creencias, nuestra visión de la vida. Malo porque no es bueno vivir en esta ambigüedad, en esta falta de suelo claro donde pisar o camino de vida que tomar. Creo que, poco a poco, a través de las decisiones y de nuestros caminos, esta generación definirá la forma que quiere darle al mundo, a la sociedad y a sus vidas».
El pensador es una travesía por la mente del autor, que con un toque sensible y optimista afronta el desafío del autoconocimiento en soledad y en sociedad, y cómo repercute esta última en el individuo, y la búsqueda y el significado de la libertad.
Su perfil autobiográfico sin duda hará posible que todos los lectores puedan encontrar en sus palabras la comprensión que necesitan, y aprenderán junto a él a hallarse a sí mismos y, sobre todo y lo más importante, a quererse para poder querer a los demás.
«Creo que el amor es en esencia lo que somos. De alguna manera, lo que debemos buscar es expresarnos. Sin reprimirnos. Sin miedo, sin juicio. Un acto de amor tiene muchas formas. Y en última instancia, es importante honrar nuestra verdad. A veces confundimos el amor con ser complacientes o con anteponer las necesidades de los demás a las nuestras. Partiendo de mi precepto de que, en esencia, lo que somos es amor, la búsqueda de la expresión de uno mismo es el mayor acto de amor que se puede dar’.
Ciertamente, una propuesta fresca, novedosa y enternecedora que se quedará en el corazón de todo aquel que la lea.
La ‘ópera prima’ de Íñigo Usabiaga Gervas ya está disponible en librerías.
Fuente Comunicae