El director general de la OMS tilda de «falsa e inaceptable» la acusación de EEUU a China por «comprarle»
El director general de la Organización Mundial para la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha tildado este jueves de «falsos e inaceptables» los comentarios del Gobierno de Estados Unidos en los que acusó a China de «comprar» a Tedros, en el marco de las disputas por la gestión de la pandemia de coronavirus.
Pompeo habría hecho estas declaraciones en una reunión a puerta cerrada con legisladores británicos que tuvo lugar el martes en la Henry Jackson Society de Londres durante su visita a Reino Unido, según informó el miércoles la prensa británica.
«Cuando más importaba, cuando había una pandemia en China, el doctor Tedros fue comprado por el Gobierno chino», habría afirmado Pompeo. «Digo esto con una firme base de Inteligencia, se hizo un acuerdo», habría señalado, según fuentes consultadas por The Times y The Telegraph , entre otros medios británicos.
En respuesta, Tedros ha manifestado este jueves en rueda de prensa que «los comentarios son falsos e inaceptables y no tienen base alguna». «Nuestro único objetivo y el objetivo de toda la organización es salvar vidas», ha manifestado.
«Si hay una cosa que realmente nos importa, y que debería importar a toda la comunidad internacional, es salvar vidas. No nos veremos distraídos por estos comentarios y no queremos que la comunidad internacional se vea distraída», ha agregado.
Así, ha destacado que «una de las mayores amenazas a las que se hace frente sigue siendo la politización de la frontera», antes de recordar que «la COVID-19 no respeta fronteras, ideologías ni partidos políticos».
Tedros ha recalcado que «la política con la COVID-19 debería estar en cuarentena» y ha agregado que «la politización (de la pandemia) ha hecho que la situación sea peor», al tiempo que ha pedido mayor «solidaridad».
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció en mayo la salida del país de la OMS por lo que considera una mala gestión de la pandemia de coronavirus. Tanto el presidente como Pompeo han acusado a la OMS de ocultar la supuesta responsabilidad de China en la aparición y propagación de la COVID-19, llegando a hablar del «virus chino».