El diagnóstico de la endometriosis puede demorarse entre 7-8 años porque sus síntomas parecen los de la menstruación
La endometriosis es una enfermedad benigna que se caracteriza por la presencia de tejido endometrial fuera del útero, afecta a entre un 10 y 15 por ciento de las mujeres en edad fértil y su diagnóstico puede demorarse entre 7 y 8 años dado que los síntomas son semejantes a los del ciclo menstrual.
Así lo asegura el jefe del Servicio de Ginecología Oncológica del MD Anderson Cancer Center Madrid, Javier de Santiago García, con motivo del Día Mundial de esta patología, reconociendo que los síntomas son muy variados y los dolores que causa pueden ser leves.
Puede aparecer en los ovarios, en el peritoneo e incluso en lugares menos frecuentes como la vejiga, el intestino o el estómago. Y en el caso de que la enfermedad se manifieste a través de síntomas, los más comunes son la dismenorra (menstruación más dolorosa de lo habitual), la dispareunia (dolor durante o después las relaciones sexuales), la infertilidad y el dolor pélvico crónico.
Pese a la dificultad diagnóstica, este experto recuerda que puede hacerse en la consulta ginecológica «con métodos tan básicos como la exploración o la ecografía», ha aclarado.
Los tratamientos utilizados para tratar esta patología se dividen en analgésicos, tratamiento hormonal y cirugía. «Naturalmente debe estar enfocado a preservar o mejorar la fertilidad de las mujeres, pero los más habituales son los tratamientos hormonales, que provocan atrofia del endometrio o anovulación», añade.
Con la anovulación y atrofia del endometrio se palia considerablemente el dolor y la dispareunia, motivo por el que estos tratamientos son los más recetados para combatir la endometriosis.
Además, De Santiago ha asegurado que el gran avance en el abordaje de la endometriosis viene de la mano de la cirugía laparoscópica, que tiene grandes ventajas para los pacientes porque es mínimamente invasiva.
De igual modo, este experto admite que la enfermedad puede estar relacionada con ella factores genéticos, inmunológicos o medioambientales, al igual que también se asocia con algunos tipos histológicos de cáncer de ovario. «Aunque el incremento del riesgo de padecer este tumor sea bajo en pacientes con endometriosis, es necesario tenerlo en cuenta y hacer un seguimiento constante», ha apuntado.